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La visita del Papa llenará los hoteles "dos o tres días"

Cuando se anunció el viaje a Santiago de Compostela del Papa Benedicto XVI prevista el próximo 6 de noviembre, los teléfonos de las agencias comenzaron a sonar. "Cualquier visita de Papa significa automáticamente una afluencia masiva", asegura Enrique Lorenzo, subdirector de una de las grandes mayoristas de Galicia, CN Travel, de Sanxenxo. Pero pone dos pegas. "Es una lástima que no venga antes, porque eso ayudaría a que la gente tomase conciencia de que estamos en año Xacobeo. Y es innegable que los hoteles se llenarán, pero dos o tres noches, lo que dure su estancia". José Antonio Liñares, presidente de la Asociación de Turismo de Santiago, coincide plenamente con el diagnóstico. "Será algo puntual, para tres días, quizá el efecto dure toda la semana". Echa cuentas de cuánta gente puede provocar el acto: "Siendo rigurosos", alrededor de 60.000 a 80.000 visitantes contando con el alojamiento ilegal. La estadística no tiene referencias concretas de cuando Juan Pablo II estuvo en Compostela (en el Año Santo 1982 y en un encuentro con los jóvenes en el 89), pero en los recuentos de los anuarios del INE no se aprecian variaciones significativas.

El presidente de las agencias de viajes, José Manuel Manciñeiras, la ve como una tabla de salvación para un año lleno de incógnitas, aunque insiste en que "sería determinante si se hubiera planificado para abril, por ejemplo, ya que es muy importante el efecto arrastre que genera, pero siendo en otoño sólo podemos confiar en una afluencia puntual, que seguro será importante". Las reservas se han activado y pronto será difícil encontrar una habitación libre en Santiago para esos días.

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