_
_
_
_
_
Necrológica:
Perfil
Texto con interpretación sobre una persona, que incluye declaraciones

Juan Antonio Romero, dirigente jornalero andaluz

Ex diputado, alcalde y sindicalista, demandó una reforma agraria integral

Raúl Limón

Si en algo coinciden quienes le conocían es en que el ex dirigente comunista Juan Antonio Romero -que falleció el 13 de agosto a causa de un infarto en Sevilla- prefería equivocarse a no seguir sus ideales. Nacido en 1952 en Badolatosa (Sevilla), siempre se definió como pastor, arriero, jornalero y albañil. Pero, sobre todo, fue un convencido republicano leninista que llegó a ser alcalde de su pueblo y diputado del primer Parlamento andaluz. En el camino dejó amigos, como el ex diputado de IU Antonio Romero, y algunos sinsabores, como el generado por su apoyo y participación en un homenaje a Santi Brouard, el dirigente de la izquierda abertzale asesinado por los GAL, o las críticas a una delegación andaluza que protestó contra el terrorismo en el País Vasco.

El Comandante lideró una marcha de mil trabajadores del campo en 1983

Juan Antonio Romero se ganó el apelativo de El Comandante en la marcha de un millar de jornaleros que encabezó en 1983 para defender la reforma agraria, una política de transformación del campo que precisamente este año liquidará la Junta de Andalucía, al haber quedado obsoleta.

El compromiso político de Juan Antonio Romero comenzó pronto. En los años setenta ya recorría los pueblos de la sierra sur sevillana como militante del PCE. "Éramos unos niños", recordaba Antonio Romero en el entierro del dirigente sindical. La pareja -"nos llamaban los Romero", recordaba el ex diputado- entró entonces en contacto con figuras políticas vinculadas a los jornaleros andaluces como Diamantino García, el sacerdote fundador del Sindicato de Obreros del Campo.

De esa actividad surgió la implicación en Comisiones Obreras del Campo, del que fue secretario de Organización de 1975 a 1982 y, posteriormente, máximo dirigente en sustitución de su amigo Romero, quien escribió: "Pasábamos necesidades, dormíamos en las sedes, sobre las sillas, envueltos en pancartas".

También fue elegido diputado en la primera legislatura del Parlamento andaluz por Sevilla. Sin embargo, terminó en el Grupo Mixto después de enfrentarse a Santiago Carrillo, separarse del PCA y sumarse al Partido Comunista de las Tierras de España de Ignacio Gallego. Además, participó en el ascenso de Gerardo Iglesias en el 11º congreso del PCE. Para las elecciones municipales de 2007, creó la candidatura del Frente Socialista de Andalucía, que se presentó en Puente Genil (Córdoba) y Osuna (Sevilla), sin obtener representación. Se vio implicado en un proceso judicial por subvenciones al aceite de oliva, del que salió absuelto.

Estuvo en la alcaldía de su pueblo entre 1987 y 1991, cargo que hoy ocupa su hermano Luis. Recientemente, fundó junto a Antonio Romero la Red de Municipios por la Tercera República y era un activo miembro de La República, donde publicó numerosos artículos de opinión.

Antonio Sánchez, periodista y ex responsable de comunicación de IU, le recordaba ayer como un hombre muy comprometido con sus ideales y que en lo personal y en lo político "prefería equivocarse" a dejar de hacer aquello en lo que creía.

Lo mismo dijo Antonio Romero durante el entierro del político. "Te has equivocado 1.000 veces, pero yo siempre terminé disculpándote, porque lo hacías para acelerar la revolución, los cambios".

Juan Antonio Romero, <i>El Comandante.</i>
Juan Antonio Romero, El Comandante.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Raúl Limón
Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense, máster en Periodismo Digital por la Universidad Autónoma de Madrid y con formación en EEUU, es redactor de la sección de Ciencia. Colabora en televisión, ha escrito dos libros (uno de ellos Premio Lorca) y fue distinguido con el galardón a la Difusión en la Era Digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_