Actrices castigadas
Qué diferentes son las actrices hablando de lo que verdaderamente les importa que cuando, por contrato, dan cincuenta entrevista promocionales. Se vio en La noche temática de La 2 dedicada a retratar cómo Hollywood las castiga por tener más de 30 años. No hay papeles, se pagan peor y algunas de ellas hacen cualquier cosa por miedo a quedarse sin hacer nada. Rosanna Arquette llamó a sus amigas y filmó sus pláticas sobre todo eso. Winger, Ryan, Pfeiffer, Stone, Redgrave, Turner, Huston... se desahogan con gran rabia. Es el programa de gente educada en que más veces pudo escucharse "que se jodan esos tíos". Hubo quien teorizó sobre el puritanismo norteamericano que no considera respetable una actriz que se quita la blusa. Hubo otras que reivindicaron su culo grande y las tetas caídas. Hubo quien relató escenas de rodaje con ejecutivos calentorros y quien estaba harta de hacer de gatita del héroe. Hubo quien defendió que en Europa se envejece mejor. Y todo porque Hollywood piensa que sólo ven su cine los jóvenes y que a éstos una dama de 40 años les parece una abuela.
Una cosa sorprendente en el discurso de las chicas: hacer televisión es algo alimenticio, subsidiario. Pues uno de sus problemas será que quieren seguir estando, como si nada, en un Hollywood que se extingue porque hoy en día donde hay buen cine en EE UU es en la televisión.
El domingo, en Clever (Tele 5), propusieron una prueba con el supuesto objetivo de demostrar que el macho humano se acerca más a la hembra joven y guapa que a la fea porque aquélla tiene más llamada reproductora. La demostración consistió en aparcar a una joven junto a un coche averiado. A la fea, apenas nadie la socorrió. La guapa tuvo cola. El programa sacó un nebuloso porcentaje y formuló la citada explicación en lugar de acudir al viejo dicho: tiran más dos tetas que dos carretas. ¿Machista? No. Lo machista es no haberlo también probado con chicos.
