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Columna
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'Spoiler'

David Trueba

Lo resumió casi sin querer la actriz Carmen Machi al recoger su premio en la gala de los Max. "El teatro es lo único que no se puede bajar de Internet". Seguramente por eso, Internet quiso vengarse de la gente del teatro y les aguó la sorpresa de los premiados. Horas antes de la ceremonia, la página web de la SGAE hizo público el palmarés secreto por un error informático. Estos galardones, como ya casi todos, basan su relevancia televisiva en sumar a la sorpresa del premiado y el discurso de agradecimiento la cara de los no premiados y su forzado gesto de alegría compartida. Ganar ya no es suficiente, hay que hacerlo con constancia de los perdedores. Así lo entendieron los nominados derrotados, que acudieron a la gala con el papel bien preparado y la sonrisa cogida con esparadrapo.

Spoiler ha dejado de ser el alerón de los aviones o el papá que mima demasiado a sus criaturas, para convertirse en el tipo que destripa el final de una serie o de una película, una especie de aguafiestas bien informado que cuando le dices que aún no has visto Ciudadano Kane, te sonríe y te dice que Rosebud es el trineo de la infancia. Internet está lleno de spoilers vocacionales y la gala de los Max no ha sido más que otra víctima de su avidez. La semana pasada fueron los datos del paro, que se le filtraron al ministerio antes de anunciarlos. El spoiler absoluto sería esa abuela que teníamos en el pueblo, que por muy feliz que te viera de niño siempre te decía: "Ríe, ríe, que tú también te irás para el otro mundo". La parte seria de este asunto es que hay entendidos que llevan desde hace años previniendo de la falta de seguridad de los datos en la Red. Advierten de que sería una locura demencial utilizar este avance para el voto en las elecciones; de que el comercio electrónico expone demasiado al consumidor; de que el fraude ha aumentado exponencialmente y que el timo de la estampita ahora se hace por mail. Hasta el inventor del correo electrónico, Ray Tomlinson, sostiene que él jamás utilizaría este medio para enviar información fundamental. Nos van a convertir en desconfiados enfermizos.

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