_
_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Superchería

Los magos crean ilusiones con trucos, pero no engañan, no niegan que existe la trampa, simplemente la ocultan. Por eso no es extraño que uno de los grandes combatientes del espiritismo fuera Harry Houdini. Como mago no podía tolerar el fraude. Houdini pactó con su esposa una frase secreta. Tras su muerte, ella convocó a los espiritistas más afamados. Ninguno fue capaz de reproducirla. Pero las evidencias no convencen a todos y hay quien persiste. Ese fue el caso de Conan Doyle, que polemizó con su amigo Houdini. El autor de Sherlock Holmes defendía la existencia de casi todo, incluidos los elfos y las hadas. Para creer en el espiritismo hay que creer en muchas cosas: en que los muertos siguen teniendo consciencia; en que son parlanchines con don de lenguas; en que quieren comunicarse, pero en lugar de querer hacerlo con sus allegados lo hacen a través de unas personas denominadas médiums.

Telecinco ha fichado para un nuevo programa, Más allá de la vida, una médium británica que transmite a los invitados supuestos mensajes de parientes y amigos del más allá. La escenografía está calculada para dar una aparente, imposible, seriedad al espectáculo. No hay bolas de cristal ni mesas camilla. No hay alardes. La médium, más que un mensaje de ultratumba parece emitir un diagnóstico. Jordi González recibe a la médium y al invitado, predominan los famosos, los sienta encarados y la médium inicia su relato. Cuando termina, se despide educadamente y González pregunta al invitado si reconoce lo que ha explicado la citada señora. Sospechosamente, no se pueden hacer preguntas al espíritu visitante para aclarar cualquier duda. Lo más penoso de todo es ver cómo algunos invitados lloran cuando la médium les transmite mensajes supuestamente emitidos por hijos o padres fallecidos. No sé si hay que respetar su credulidad, pero, desde luego, es muy triste que metan a sus seres queridos en la pista de este circo de la superchería. Porque, de hecho, el verdadero médium es el propio González, que va traduciendo al invitado las parrafadas de la británica.

Por cierto, uno de los argumentos que utilizó Houdini contra quienes decían recibir mensajes de su madre es que estos los percibían en inglés, idioma que ella ignoraba. ¿En qué idioma le hablaban los espíritus a la médium británica?

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_