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El fin de semana en el que nacieron 1.354 videojuegos

La 'gamejam' se celebró de manera simultánea en 169 lugares diferentes

Para muchos, la juventud está perdida. Para otros, solo está ayuna de estímulos. Pedro González, director del máster en diseño de videojuegos de la Universidad Complutense, ha sabido tocar la tecla adecuada para motivar a sus alumnos. Durante el fin de semana vivieron una gamejam (http://www.globalgamejam.org/), un reto que consiste en crear un videojuego en 48 horas.

El MediaLab Prado fue el lugar escogido para convivir, debatir y dar forma a las ideas. La convocatoria abierta permitió la inscripción de alumnos de otros cursos, como los del grado de diseño de videojuegos que la escuela ESNE, adscrita a la Universidad Camilo José Cela, o verdaderos fanáticos, como José Manuel Alcaraz, quien, como el mítico Súper Mario, en su día a día se dedica a la fontanería. Así hasta llegar a 60 personas. Solo hay una chica: Irene Gabriel, 23 años, licenciada en Bellas Artes. El año pasado se estrenó en la gamejam y salió con grandes amigos y un novio con el que sigue. Le gustan los videojuegos, pero prefiere trabajar en otro sector porque "la presión es mucha, es muy duro".

Este evento se celebra en todo el mundo desde 2002. Nueva Zelanda dio el pistoletazo de salida. La única restricción, para evitar que se trajera el trabajo precocinado e incentivar la creatividad, era el tema: extinción.

Verona, Praga, Ciudad del Cabo, Seúl o Bangkok también se han sumado. En total, 7.759 participantes, en 169 encuentros diferentes, han creado 1.354 juegos, casi todos para ordenadores con Windows. La más multitudinaria se celebró en Dinamarca, con 284 participantes. En 2009, España participó por primera vez en este concurso en el que ganar es lo que menos importa. Una consola Nintendo Wii es el premio. A nadie le mueve ese reconocimiento. Lo importante es pasarlo bien, construir y, si el jurado se fija en ellos, mejor que mejor. Sus miembros son los más relevantes de la industria: Gonzo Suárez, histórico creador de juegos y director de la serie Commandos, Roberto Álvarez de Lara, director de Top Games, Gilberto Sánchez, director de Virtual Toys, Daniel Parente, de Enigma, y Michael Santorum, de Mercury.

Sergio Galán y Víctor Díaz crearon unas luciérnagas que se mueven en la fachada digital del edificio. Cualquiera que pase por la calle las puede manejar con la luz de su móvil, un mechero o linterna. Destacaron una reedición del Arca de Noé, la desaparición de los mamuts, y un juego que se autodestruye. El mero hecho de llegar hasta el domingo con la cabeza despejada se considera un logro. Hacia las seis de la tarde, con caras de agotamiento y sometidos una dieta de pizzas y hamburguesas, decidieron celebrar la gesta con una dosis de entretenimiento en el mundo real. Antes de que su cuerpo sacara el mítico cartel de Game Over, compartieron cervezas y anécdotas.

Por cierto, el premio de la industria fue para No more Ice de Álvaro Calvo, Enrique Luengo, Marcos Paulis e Iván Pérez. El del público se lo llevó Delete this game de Enrique Alcor, Enrique Hervás, Alfredo Jiménez y Miguel Tomé.

Los creadores de <i>Alone in the light</i> dan los últimos retoques a su juego.
Los creadores de Alone in the light dan los últimos retoques a su juego.R. J. C.

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