De la sombra a los focos

La semana pasada fue Luis Roldán, ex director general de la Guardia Civil, y esta semana le toca el turno al ex alcalde de Marbella Julián Muñoz, que tras pasar 27 meses en la cárcel tiene una apretada agenda de exclusivas televisivas. Telecinco, capaz de compatibilizar intensas campañas solidarias con entrevistas a personajes condenados por corrupción, emitirá mañana (22.30) Julián Muñoz: tercer grado. Aliñado con una introducción de Jordi González (La noria), el programa incluye declaraciones únicas del ex alcalde de Marbella (hasta ahora sólo lo ha hecho ante el juez), uno de los protagonistas estelares de la trama de corrupción inmobiliaria conocida como caso Malaya, que se encuentra en régimen de tercer grado (semilibertad).

El viernes pasado, la cadena privada invitó a Luis Roldán, condenado en 1999 a 31 años por malversación de fondos públicos, cohecho, fraude fiscal y estafa. Aquella comparecencia ante las cámaras, conducida por María Teresa Campos, fue vista por 1,8 millones de espectadores (15% de cuota de pantalla). La charla pudo haberle reportado alrededor de 50.000 euros. Ésa fue, al menos, la cifra que reclamó la Unión de Guardias Civiles (UGC) a la Audiencia Provincial de Madrid al solicitar formalmente el embargo de hasta el último euro que pudiera haber cobrado Roldán.

Cuestión de caché

Aunque Telecinco no ha revelado lo que pagó, la entrevista le costó menos que un capítulo de la serie Aída, teniendo en cuenta que duró el doble de tiempo y que ha sido explotada en un sinfín de programas.

Muñoz, que tiene un caché mucho más elevado, podría percibir en torno a 350.000 euros por un paquete de programas cuyo contenido no ha sido desvelado por Telecinco y que serán emitidos estratégicamente. El plato fuerte es una entrevista que realizaría Ana Rosa Quintana aprovechando el nuevo régimen penitenciario de Julián Muñoz, que acumula seis condenas firmes. El ex alcalde, además, ha sido acusado de blanqueo de capitales junto a su ex esposa, Maite Zaldívar, y su actual pareja, la tonadillera Isabel Pantoja, habituales de los programas de corazón.

El hechizo que estos personajes provocan en la audiencia no se refleja en la Red, donde ha tomado fuerza una campaña para boicotear estas emisiones. La idea partió de Antonio Rico, que desde el blog 625 ranas (dedicado al mundo de la televisión) pedía cambiar de canal en el momento en el que Telecinco sacara al aire la entrevista con Muñoz. Rico considera indignante que una televisión haga espectáculo del testimonio de un delincuente y le pague desorbitadas cantidades por contar su vida.