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Crítica:la lidia
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

¿Éstos son 'santacolomeños'?

A los toros de La Quinta se les ha acabado la sangre santacolomeña que se dice llevan dentro. A los toros de ayer no les quedaba una gota de ese preciado líquido bravo. Los seis toros, más el devuelto, fueron unos animales sin bravura, sin raza ni cristo que lo fundó. Fueron una mala sombra de toros, unos borregos supinos, con forma de toros. En resumen, una mentira de toros. ¡Qué diferencia de los toros corridos, bajo la misma divisa, hace dos años! Entonces los lidiaron tres toreros modestos. Pasar 730 días, con sus correspondientes noches, y se apuntan a matarlos otros más renombrados. Caso aparte, Padilla que entró en la terna por ser presuntamente amigo de un miembro de la junta administrativa.

Quinta / Padilla, El Juli, Perera

Toros de La Quinta: un saldo de corrida; el quinto, devuelto.

Juan José Padilla: estocada (oreja); estocada (ovación).

El Juli: media estocada y descabello (ovación); estocada (oreja).

Miguel Ángel Perera: Estocada (ovación); estocada (ovación).

Plaza de Toros de Vista Alegre. Bilbao, 20 de agosto. Quinta de feria. Casi lleno. Se guardó un minuto de silencio por el accidente aéreo de Barajas.

Como ayuda a la confusión, el público tomó un papel verbenero. Pidió las orejas para Padilla y El Juli en sus dos faenas de escaso valor torero. La faena de Padilla, premiada con oreja -en el primero de la tarde- estuvo nimbada por la vulgaridad. Pase sin dominio, y medios pases. Faena inútil, como un teléfono descolgado. La faena a su otro toro fue aún más insulsa. Pero al público le encanta Padilla cuando prende las banderillas sobre todo las del violín, como le gustan también sus esperpenteces.

La labor de El Juli no tuvo valor ni calidad. De poco fuiste en su primero y voluntarioso, sin más, la de su segundo, premiada con una oreja.

Ese buen torero que desea llegar a ser Miguel Ángel Perera se estrelló con la corrida de La Quinta. Puso voluntad máxima. Trató de no defraudar. Mas con aquella basura bovina no hay torero alguno que pudiera brillar. Puede llegar a pensar que todo desaparece en un día: la celebración y lo celebrado (en alusión a su excelente actuación del pasado lunes).

Juan José Padilla, en su primero de la tarde, al que cortó una oreja.
Juan José Padilla, en su primero de la tarde, al que cortó una oreja.FERNANDO DOMINGO-ALDAMA

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