_
_
_
_
_
Reportaje:TALENTOS

Heroínas del cómic francés

Dos miradas femeninas triunfan en el mayor mercado del tebeo europeo

Poco tiene que ver la explosión de vitalidad en tinta china de Catel Muller -el nombre tras la famosa Kiki de Montparnasse-, con las estampas oníricas y opresivas que salen del lápiz de Rachel Deville.

"Soy perfeccionista y prefiero los matices del lápiz", dice Deville

Aun así, el Espacio Sins Entido de Madrid cobija simultáneamente, hasta el 5 de abril, las páginas originales de los tebeos de estas dos autoras francesas en la exposición Sin nosotras (en la que también se incluyen dos españolas: la barcelonesa Sonia Pulido y la alicantina Lola Lorente). Aunque la muestra no se articule realmente en torno a un leitmotiv femenino, permite apreciar las maneras dispares de abordar la página en blanco que tienen dos autoras enfrentadas al mayor mercado editorial de tebeos europeo.

La primera, Catel Muller (Estrasburgo, 1964) es una figura consagrada en Francia, y su Kiki de Montparnasse está entre los mejores cómics publicados en 2007. Las páginas que se exhiben en Sins Entido son un buen ejemplo de la expresividad de sus rostros y de su enérgica fluidez narrativa, cualidades que hacen que esta obra ingente sobre la musa y artista que ayudó a forjar y a alborotar el París de las vanguardias se devore. Aunque sólo firma el dibujo y los textos lleven la rúbrica de José Luis Bocquet, ella ideó el proyecto, y empezó por la exhaustiva investigación destinada a limar los claroscuros y excesivas mitificaciones en torno a la figura de Kiki. Una labor titánica, según Muller, incluso para dos personas que ya tenían experiencia trabajando en obras de este tipo -ella publicó en 2004 un estudio de Edith Piaf, inédito en España, y él ha escrito las biografías de Hergé o Goscinny-. "Investigamos a fondo durante un año. Además de entrevistar a muchos nietos de gente que la conoció personalmente, visitamos las casas y habitaciones en las que vivió e incluso tratamos de reconstruir las acciones de Kiki in situ. Mucho de eso está en el cómic", cuenta Muller por teléfono desde su casa de Estrasburgo.

Por desgracia, la muestra no cuenta con el dibujo de Muller para la portada de Kiki de Montparnasse, una versión de la famosísima fotografía El violín de Ingrés, de Man Ray, en la que la historietista retrata el momento previo a la instantánea. "Me dio mucho respeto, pero la elegí para la portada por tratarse de un símbolo que representa tan bien la vida del artista surrealista", asegura.

En cuanto a los dibujos a lápiz de Rachel Deville (Firminy, 1972), lo primero que destaca es su laboriosidad. Algunas viñetas de Lobas, su ópera prima, le han llevado hasta tres horas de trabajo, según confiesa la autora en Barcelona, donde reside desde 2000. "Soy muy perfeccionista y no me convence la tinta china, no tiene los matices del lápiz. Además, lo siento más artesanal, así dibujo como cuando era pequeña. De hecho, sigo haciéndolo con los lápices HB de toda la vida". La ilustración es la pasión que la ha mantiene horas y horas despierta, pese a dedicarse profesionalmente al teatro y al canto. Su estreno tardío en el mundo del tebeo la ha pillado viviendo en España. Por eso se ha publicado originalmente en castellano y ahora está a la espera de ver la luz en Francia.

Lobas es un alucinado repaso autobiográfico de la relación que Deville tiene con su hermana gemela, Anne, un relato que se apoya en los aspectos más oscuros y opresivos de la mitología del doble. "Los espacios me interesan. De hecho, en el 95% de Lobas se desarrolla en espacios tremendamente asfixiantes", asegura la autora, que ya prepara el guión de su segundo tebeo, una historia sobre un individuo que llega a vivir solo a una megalópolis, con la agresividad que inundan las grandes ciudades ("Un tema que me fascina y que al mismo tiempo me asusta"). Los fabricantes de lápices HB ya pueden ir frotándose las manos.

Rachel Deville

- Dibujante y guionista francesa de 36 años.

- Su ópera prima Lobas se centra en la relación con su hermana gemela, y de paso indaga en la mitología del doble.

- Dedica hasta tres horas a cada una de sus viñetas, que dibuja a lápiz.

Catel Muller

- Dibujante francesa de 43 años.

- Su obra Kiki de Montparnasse recupera la figura de la modelo, actriz y cantante que se convirtió en musa de diversos artistas del París vanguardista de entreguerras. Ha sido un éxito de ventas.

- El cómic obtuvo el Premio Esencial FNAC-SNCF, votado por internautas, en el salón de Angulema, el más importante del mundo.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_