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Moda

Este bolso está hecho de botellas

Nace la primera generación de tejidos 100% reciclados y reciclables

Carmen Mañana

Con 84 botellas de plástico se puede hacer una montaña muy grande de residuos, 168 maceteros -de medio envase cada uno- o una maleta. No es magia sino tecnología. La que ha patentado la firma española Ecoalf y le permite convertir botellas de plástico y redes de pesca en complementos y ropa. "Se trata de la primera generación de tejidos 100% reciclados y reciclables, que no contienen PVC y poseen el aspecto de un nailon convencional", anuncia Javier Goyeneche, fundador de la marca Fun&Basics y responsable de este proyecto, que llegará a las tiendas en febrero.

Para fabricar un metro de tejido Ecoalf 1.0 se necesitan 70 botellas de plástico PET (como las de agua). Éstas se funden y se obtienen unas escamas de plástico que luego se transformarán en fibra, hilo y finalmente tela. Con 42 envases se fabrica una zapatilla; con 17, un neceser y, con 83, un bolso de viaje. Algunos de estos productos, como las maletas, necesitan un soporte que refuerce el tejido y que, en el caso de Ecoalf, no está hecho de PVC sino de otro material llamado TPE, igualmente resistente y flexible pero reciclable. "Si lo tirases en el campo desaparecería en 12 meses. El PVC se queda para siempre y es muy tóxico", argumenta Goyeneche.

Con las redes de pesca se elaboran, de una forma muy parecida al Ecoalf 1.0, otros tejidos bautizados como Ecoalf 3.0, 4.0 y 5.0. Todos estos procesos se realizan en colaboración con una empresa textil de Taiwan que posee la etiqueta Green Mark, un certificado medioambiental británico que garantiza que la fabricación es sostenible.

Pero, ¿cómo se convierten estos diseños reciclados en reciclables? "Estamos trabajando con una empresa japonesa para que nuestros clientes nos traigan las prendas Ecoalf que ya no usen y nosotros podamos reciclarlas y convertirlas en otro producto de máxima calidad sin utilizar nuevos recursos", adelanta Goyeneche. El empresario espera que este servicio esté disponible dentro de un año. El mismo tiempo en el que calcula que los costes de producción de sus tejidos ecológicos se igualen con los de los tradicionales, más asequibles.

Porque, pese a que la cumbre de Copenhague no haya sido un éxito, lo verde vende. Aunque en principio su elaboración sea más cara -un bolso Ecoalf puede costar 194 euros-, compensa. "La sostenibilidad forma parte del ADN de las empresas del futuro. En países como Alemania, Noruega o Japón se considera imprescindible", explica Goyeneche. Así que hace dos años, el equipo creativo de Fun&Basic comenzó a "reorientar la trayectoria de la empresa" hacia la responsabilidad ecológica. Al principio, pensaron en utilizar algodón orgánico, como otras muchas marcas. Pero les echó para atrás "que se necesitasen 20.000 litros de agua para fabricar cada kilo de algodón". Optaron, entonces, por materiales reutilizados y reutilizables, con los que, más allá de ropa y complementos, ya planean, en colaboración con Sun Planet, una colección de muebles y una línea de gafas.

Zapatillas, abrigos y bolsos fabricados con Ecoalf 1.0, un material obtenido a partir de botellas de plástico recicladas.
Zapatillas, abrigos y bolsos fabricados con Ecoalf 1.0, un material obtenido a partir de botellas de plástico recicladas.

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