Angelina Jolie, entre los poderosos del planeta

Henry Kissinger, Condoleezza Rice o Alan Greenspan son personajes con un inmenso poder pero con cero glamour y mucho menos sex appeal. Sus nombres forman parte de uno de los más influyentes laboratorio de ideas estadounidenses, el Council of Foreign Relations (consejo de relaciones exteriores), donde a partir de esta semana no sólo se verá a periodistas especializados en política internacional, sino también a los paparazzi.

Angelina Jolie, conocida primero por su casi ofensiva belleza, después por su trabajo como actriz y más tarde por su entrega a las labores humanitarias, acaba de ser admitida en el Council of Foreign Relations por un periodo de cinco años para "inspirar a la próxima generación de políticos", según recogía ayer el diario Financial Times.

No está muy claro en qué consistirá la inspiración que esta actriz, declarada recientemente por los oyentes de la BBC como la "más sexy de la historia", le aportará a un organismo en el que se discuten desde soluciones al conflicto palestino-israelí a nuevas estrategias para Irak.

Pero quizás su trabajo como embajadora de buena voluntad de las Naciones Unidas desde 2001 o sus paseos por Davos durante los encuentros del World Economic Forum le hayan dado la preparación suficiente para formar parte de la élite de los poderosos del planeta, aunque ella sólo tenga estudios equivalentes al bachillerato español. El tiempo lo dirá.

La noticia se hacía pública mientras Angelina aterrizaba en la frontera entre Chad y Sudán, en una de sus misiones humanitarias como embajadora de la ONU.