Aretha Franklin lucha contra un cáncer de páncreas
Una leona encima de los escenarios, la leyenda viviente del rythm and blues Aretha Franklin se prepara para la lucha de su vida. Según sus familiares padece cáncer de páncreas, una enfermedad a la que sobrevive solo el 35% de los que la sufren. A sus 68 años, Franklin ha sido una ganadora en muchas instancias. Fue la primera mujer que aceptó el Rock & Roll Hall of Fame. Catorce de sus singles han vendido más de un millón de copias. Tiene 20 premios Grammy y ha recibido un doctorado honorífico por la Universidad de Yale.
Estados Unidos estaba acostumbrado a ver cómo los años no le pesaban a Franklin. Seguía editando discos y actuando en los escenarios. En 2009 cantó el himno patriótico My Country, Tis of Thee en la apertura de la presidencia de Barack Obama. Por eso la industria musical se extrañó cuando en octubre canceló, inesperadamente, dos conciertos en Misuri y Virginia. El día 29 de ese mes se la vio en el hospital Sinai-Grace, de Detroit, la ciudad donde reside. Semanas después, su representante anunció que cancelaba todos sus conciertos hasta mayo de 2011.
Este año fue el primero en una larga temporada en que Franklin se perdió la cena anual de Acción de Gracias en la iglesia de Detroit en la que su padre, el reverendo Clarence L. Franklin, era pastor. Finalmente, el pasado jueves 2 de diciembre, un portavoz reveló que acababa de pasar por el quirófano. "Dios aún tiene el control", dijo la cantante. Aquel comportamiento tan enigmático inició una competición febril de la prensa local de Detroit por ver quién era el primero en enterarse de qué mal consumía a Aretha.
El miércoles, un familiar no identificado le dijo a la corresponsalía local de la cadena Fox que era cáncer. El tabloide The National Enquirer, que ha ganado cierta credibilidad desde que en 2008 reveló que el ex candidato John Edwards tuvo un hijo con la productora de vídeo Rielle Hunter, añadió que era de páncreas. La cantante, sin embargo, no se resigna. A través de su prima, Brenda Corbett, prometió ayer que la próxima primavera estará sobre un escenario. Aunque médicamente puede parecer muy difícil, lo seguro es que Franklin luchará por ello con la formidable fuerza que ha demostrado sobre los escenarios de su vida.
