Joaquin Phoenix se pasa al 'hip-hop'

Menudos 11 minutos, debió de pensar David Letterman. El pasado miércoles, Joaquin Phoenix fue uno de los invitados en su programa de televisión, con motivo del estreno de su nuevo, y según él, último filme, Two lovers, de James Gray. El actor, con gafas de sol, una gran barba y pelo descuidado a camino entre Karadzic disfrazado y los últimos días de Bobby Fisher, se sentó en el sofá de los invitados, se rascó numerosas veces la barba -"los nervios", masculló como excusa- y no dejó de mirarse las uñas de las manos.

Letterman, que recordó que la última vez que estuvo el actor en su show, hacía tres años, no tenía precisamente ese aspecto, insistió en que Phoenix no renunciara a la interpretación. Su respuesta: "Me voy a dedicar a la música". "Cuando te vi en En la cuerda floja [el biopic sobre el músico Johnny Cash] pensé que actuabas y cantabas arrolladoramente. ¿Irán por ahí los tiros?". "No, voy a hacer hip-hop". El público se echó a reír y el actor les miró inquisitivamente, mientras preguntaba al presentador: "¿Es un chiste? ¿Qué drogas les das?".

Poco más aportó Phoenix durante los 11 minutos de entrevista. No recordó el nombre de su compañera de reparto, Gwyneth Paltrow, se mosqueó con el músico-animador del programa y más aún con el público, consideró "muy poco probable" que volviera al programa a mostrar su música, pegó un chicle en la mesa de Letterman y éste, entre risas, sólo pudo decir: "Lamento que no pudieras estar aquí". Su cuerpo reposaba en el sofá, su mente...