_
_
_
_
_
Necrológica:
Perfil
Texto con interpretación sobre una persona, que incluye declaraciones

Mário Corino de Andrade, neurólogo portugués que identificó la paramiloidosis

Mário Corino de Andrade fue el neurólogo que en 1952 identificó la primera forma de amiloidosis hereditaria, una enfermedad del sistema nervioso periférico que se transmite de padres a hijos con un 50% de probabilidad y se traduce en la pérdida progresiva de facultades sensitivas, motoras y autonómicas. El neurólogo murió en Oporto, con 99 años.

La enfermedad es conocida como paramiloidosis, enfermedad de Andrade o, popularmente, en Portugal, como el mal de los piecitos, porque sus primeros síntomas son la pérdida de sensibilidad en los pies. Inicialmente, se pensó que sólo existía en Portugal, restringida a unas cuantas familias. Más tarde se detectaron casos en otros países y otras variantes. El tipo portugués existe también en Japón, Suecia, Palma de Mallorca y Brasil. La enfermedad se manifiesta entre los 30 y los 40 años y no existe cura, pero puede ser detectada durante las primeras semanas de embarazo y su desarrollo puede ser retardado.

Corino de Andrade era considerado una de las más importantes figuras de la ciencia y de la medicina portuguesa. Pero fue también un resistente a la dictadura que gobernó Portugal entre 1926 y 1974, y llegó a ser encarcelado por la policía política.

Médico desde 1931, dedicó gran parte de su vida a la investigación. Estudió medicina en la Universidad de Lisboa y pasó después algunos años en Ginebra (Suiza), trabajando en el Laboratorio de Neuropatología de la Facultad de Medicina de la ciudad.

En 1938 volvió a Portugal, para el Hospital General de San António de Oporto, donde creó el servicio de neurología. Fue ahí donde conoció a algunos pescadores de aldeas de la costa del norte de Portugal que se quejaban de problemas en los pies. Observó cómo empezaban por no sentir los cortes que les provocaban las cuerdas de los barcos y como, después, poco a poco, sufrían sucesivas perturbaciones a nivel digestivo, cardiaco y del sistema nervioso.

La excelencia de su trabajo fue varias veces reconocida dentro y fuera de Portugal con premios y homenajes. Corino de Andrade "abrió un camino de investigación que continúa hasta hoy para enfermedades degenerativas del sistema nervioso central", según Nuno Grande, médico y profesor jubilado del Instituto de Ciencias Biomédicas Abel Salazar, de Oporto.-

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_