Obsesiva, insegura y discreta

Penélope Cruz ofrece una muy poco habitual visión de sí misma en una entrevista publicada por la edición de agosto de la revista británica Psychologies. La actriz, que desmintió anoche esas declaraciones a través de su oficina de representación, explica la inseguridad que padece cuando empieza a rodar, su obsesión con saber qué dicen de ella los medios y confiesa que quiere ser madre, pero no ahora mismo.

La negativa a hablar de su vida privada es consecuencia de su rechazo a la creciente tendencia de los medios a publicar cotilleos. "Es peligroso, desagradable, malo para nuestra sociedad en muchos sentidos". En su primera entrevista estuvo dos horas hablando de cine; "pero lo único que publicaron fueron mis comentarios sobre cosas personales". "Siempre es una trampa compartir tus secretos".

Sin embargo, habla por primera vez de sus instintos maternales. "Quiero tener hijos algún día, pero no ahora". "Cuando lo haga quiero hacerlo muy bien. Quiero que sea el mejor proyecto de mi vida", proclama. ¿Le atrae el matrimonio? "No sé si creo en el matrimonio. Creo en la familia, en el amor y en los hijos", dice.

Prueba de profesionalidad o quizás de sus demonios internos, el haber trabajado con los mejores directores y haber ganado un Oscar no ha acabado con el miedo del debutante. "No es broma. En cada película, durante la primera semana, siempre creo que me pueden despedir".

Admite que aunque dice que nunca lee, está obsesionada con saber qué se publica sobre ella. "Digo que no, pero lo leo todo. Si tengo media hora libre me voy a mirar Internet. Es una manera garantizada de enfadarse por nada", bromea.

[Antonio Rubial, jefe de prensa de la oficina de representación de Penélope Cruz, afirmó anoche que se trata de "una entrevista totalmente inventada", y que los abogados de la actriz estudian qué medidas legales tomar].