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'Rolling Stone' sopla las diez velas

La edición española de la mítica revista de rock celebra su cumpleaños con una fiesta con músicos como Alejandro Sanz, Pereza, Miguel Ríos o Loquillo

"Mientras exista la música existirá Rolling Stone", afirma Pedro Javaloyes, el director de la sucursal española de la publicación estadounidense. La pata local del más grande y veterano de los dinosaurios de la prensa rock cumplió este mes 10 años en los quioscos (la revista madre se fundó en San Francisco en 1967) y ayer lo celebró con una fiesta y la entrega de los Premios Rolling Stone, instituidos para la ocasión.

Para el evento se eligió la sede madrileña de otra popular franquicia relacionada, al menos en el nombre, con la música rock: el Hard Rock Café de Madrid. Y se tiró de poder de convocatoria para que acudiera la aristocracia pop española y convertir la alfombra roja en algo que era un poco Los 40 (Carlos Jean, Macaco o Pereza) y un poco Kiss FM (de Marta Sánchez a Coque Maya, pasando por Mikel Erentxun). Además, estaba prevista la presencia de famosos pop de otras ramas, (el actor porno Nacho Vidal, los escritores Ray Loriga y Lucía Etxebarría o el restaurador Sergi Arola). "Rolling Stone tiene la particularidad de que es la única revista capaz de reunir a las cuatro generaciones del pop español. La única que puede combinar a Miguel Ríos y Pereza. Estos premios están pensados para reunir en un palmarés a todos ellos", explica el máximo responsable de la publicación.

"sólo nosotros reunimos a cuatro generaciones de pop", dice su director

Con ese criterio la gran estrella de la noche no podía ser otro que Alejandro Sanz. Él fue el primero en recibir el galardón de manos de la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde. Entre otras cosas, porque fue su primera portada. En 1999 Rolling le eligió "capitán de la selección española de rock" en el primer número de la publicación.

"Lo agradezco por esta labor altruista por recordarnos la edad que tenemos", dijo marcando el ritmo acelerado, casi frenético, de una ceremonia express -nueve premios en 20 minutos, porque el décimo en el palmarés, Bunbury, está en México-. Así Miguel Ríos: "Buenas noches, nietos de rock'n' roll", dijo parafraseándose, y apenas tardó un minuto en recordar que mientras él cantaba su himno a la alegría "la revista aún gateaba". Pereza se puso en su papel: "Para una puta revista de puto rock'n' roll que hay en este puto país está bien que nos den un puto premio", dijo Rubén, haciendo gala de lo que cree que significa "mantener vivos los valores del rock star system".

Miguel Bosé, "un tipo arriesgado capaz de jugársela por una causa", recordó la importancia de la solidaridad en el rock, Loquillo lo compartió con su otra mitad en Trogloditas, Sabino Méndez, y Manolo García se confesó lógicamente abrumado porque su álbum Enemigos de lo ajeno sea el mejor de la historia para la publicación. Macaco tiró de buen rollo, mientras que Leonor Watling recordó la extraña naturaleza de los premios. "Son tan raros como las críticas sangrantes, pero si esas se aceptan, estos también".

La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, entrega el premio a Alejandro Sanz.
La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, entrega el premio a Alejandro Sanz.CLAUDIO ÁLVAREZ

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