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500 personas acampan en Órgiva para la Fiesta del Dragón, que fue prohibida

Cerca de 300 vehículos de todo tipo y más de 500 personas se concentraban ayer en el paraje de Los Cigarrones (Órgiva, Granada) para celebrar la Fiesta del Dragón, con la que la que pretenden dar la bienvenida a la primavera, a pesar de que el Ayuntamiento ha decretado la ilegalidad de la misma.

La afluencia de público a las inmediaciones del este lugar, junto al río Guadalfeo, se produjo en masa desde la tarde del jueves, según fuentes de la Policía Local, que por el momento procede a la identificación de los campistas interponiendo la consiguiente denuncia que se remitirá a Confederación Hidrográfica del Sur. Este organismo redactó un informe en el que se advierte del riesgo de contaminación del río por el uso de jabones y detergentes por parte de las personas acampadas en sus márgenes.

En la zona se encuentran agentes de la Polícia Autonómica y de la Guardia Civil que realizan permentemente controles e informan a los recién llegados de la prohibición de acampar en el lugar y de la ilegalidad de la celebración. Pero por el momento los campistas no tienen intención de abandonarlo.

Tres días de fiesta

Las más de 500 personas, en su mayoría pertenecientes a grupos hippies, permanecerán en el lugar para la celebración de la fiesta cuyo comienzo estaba previsto para ayer prolongándose hasta el próximo domingo. La mayoría de los campistas concentrados son de nacionalidad británica, según la policía, pero también hay españoles, noruegos, alemanes y franceses, que se reunen en Los Cigarrones como en ocasiones anteriores para celebrar la llegada de la nueva estación.

El alcalde de Órgiva, Alfonso Martín, advierte de la ilegalidad de la celebración y abrirá expedientes a todos los que acampen en la zona. Martín se mostró confiado en que la fiesta al final no se produzca, ni se registren altercados entre los asistentes y los agentes.

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Los primeros campistas se acercaron al paraje a finales del mes de febrero. Ante la afluencia de público, el Ayuntamiento redactó un documento en inglés, francés y alemán para todos los recién llegados en la que se les daba un plazo de diez días para marcharse, si querían evitar que se les echase por la fuerza. Según Martín, la carta ha provocado que la asistencia sea menor respecto a ediciones celebradas otros años.

Según la consejería de Medio Ambiente, la acampada libre está prohibida en Los Cigarrones por el riesgo de incendios que puede producir tal acumulación de gente. En 2002, la Fiesta del Dragón terminó con la muerte de dos personas por consumo de estupefacientes. Sus incondicionales son convocados a través de Internet.

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