Barrientos sigue en prisión para conservar pruebas
La juez del caso contra la corrupción en el Ayuntamiento de Estepona (Málaga) ha denegado la libertad al ex alcalde Antonio Barrientos para evitar que utilice su influencia para alterar pruebas que podrían ser vitales en la causa. Es la segunda vez que el antiguo regidor, expulsado el PSOE, obtiene una negativa judicial a recobrar la libertad desde que ingresó en prisión preventiva hace dos meses.
Isabel Conejo, instructora del procedimiento, le considera el "máximo responsable" de una estructura creada "para obtener fondos de promotores y empresarios" con la que supuetamente "pretendían financiar actividades tanto públicas como privadas de los partidos políticos que gobernaban en coalición".
La juez justifica su negativa a dejarle abandonar la prisión en que todavía quedan pendientes una serie de diligencias "de gran importancia" sobre las que quiere "evitar el riesgo de manipulación de prueba", señalaron ayer a Efe fuentes judiciales.
La instructora cree que con el secreto de las actuaciones no bastaría para evitar que se oculten o alteren pruebas relevantes y otorga a Barrientos "capacidad para acceder por sí solo o a través de terceros a fuentes de prueba o para influir sobre otros imputados, testigos o peritos".
El ex alcalde está acusado de presuntos delitos de cohecho, tráfico de influencias, malversación y blanqueo de capitales. Junto a él continúan en prisión por este caso su jefe de gabinete y dos concejales de la formación posgilista Partido Estepona.
