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Aulas

Cheques para estudiar

Se abre la campaña de los libros de texto gratuitos para 950.000 alumnos

Los centros de educación Primaria y Secundaria de Andalucía están inscribiendo en el registro informático de la Consejería de Educación los libros de texto que usarán el próximo curso, en lo que supone el primer paso para que todos los estudiantes que cursen la educación obligatoria en Andalucía tengan acceso gratuito a los libros. Esta medida, de la que se beneficiarán casi un millón de alumnos, forma parte del Plan de Apoyo a las Familias de Andalucía.

Los estudiantes utilizarán los libros en régimen de préstamo
Una madre dice que el importe del cheque no cubre todos los libros

"Además de suponer una importante ayuda para muchas familias, en mi opinión sirve también para enseñar a los alumnos en competencias que son básicas", explica Juan Bautista Ruiz, presidente del AMPA Fuente de la Mora, del Instituto de Enseñanza Secundaria Alfaguara de Loja. En efecto, uno de los objetivos del programa es educar a los jóvenes en la equidad y en diferentes comportamientos sociales que les serán beneficiosos. Los libros que recibirán no serán de su propiedad, sino que los tendrán durante el curso en régimen de préstamo. Al finalizar el año, una comisión paritaria, de la que forman parte dos docentes, dos padres y dos alumnos, recogerá el material y decidirá qué libros están en condiciones de ser reutilizados. "Los que hayan quedado inservibles tendrán que se abonados por el alumno, lo que fomenta el cuidado y el sentido de la responsabilidad", opina Ruiz, que forma también parte de la asociación provincial de padres.

Además, los padres de los alumnos no están obligados a acogerse al programa. Es decir, si alguien quiere comprar los libros sin cheques, y tenerlos de estreno en propiedad, puede hacerlo. "No es recomendable, porque sería situar al alumno en un punto de partida superior que en realidad no existe. De todos modos, en mi centro no ha habido ni un solo caso, y en Andalucía son muy pocos quienes optan por esta postura, que ni es más cómoda ni favorece la igualdad", concluye Pérez.

Los 950.000 alumnos andaluces entre seis y 16 años que tendrán libros gratis, lo harán gracias al método de los cheques-libro. Una vez que los libros hayan sido elegidos por el profesorado de los centros, la dirección de éstos imprimirá un cheque-libro que será entregado por el tutor a cada uno de sus alumnos. "Ese cheque tiene el mismo valor que el dinero, y por tanto no puede perderse", explica Mercedes González, directora general de Participación y Equidad en Educación. Con el cheque, los alumnos podrán acudir a cualquier librería y realizar la compra, del mismo modo que si estuvieran empleando dinero.

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Aunque el plazo para entregar los cheques-libro se abrió el pasado 10 de junio, lo normal es que la mayor parte de los estudiantes los reciban en septiembre, durante los primeros días de clase. De todos modos, no todos los alumnos recibirán un cheque-libro. Los matriculados en los cuatro primeros cursos de Primaria, recibirán un cheque por alumno que se entregará con las notas finales del curso, es decir, en las próximas semanas. Los que se matriculen en quinto y sexto de Primaria no recibirán ningún cheque, ya que serán los que este año reutilicen los comprados el curso pasado.

En Secundaria, recibirán cheques los alumnos de segundo y cuarto de ESO, mientras que los de primero y tercero aprovecharan el material adquirido el pasado año por sus compañeros.

"Los libros, en general, llegan en muy buen estado. A comienzos del curso se les explica a los alumnos qué deben y qué no deben hacer con ellos", explica Concepción Sánchez, profesora de Lengua de un instituto de enseñanza Secundaria en Sevilla capital.

Sobre el valor de los cheques, que resulta directamente proporcional al beneficio que obtiene cada familia por la medida, se produce una oscilación. El material de primero de Primaria ronda los 120 euros, mientras que los libros de tercero y cuarto de Secundaria se sitúan en torno al doble, 240 euros. El programa de gratuidad de libros de texto ha supuesto ya una inversión de 244 millones de euros, y se han presupuestado 300 millones de euros adicionales para los próximos cinco años.

La ayuda no siempre cubre la totalidad de los gastos. Bibiana Delgado tiene 25 años y un hijo de siete, llamado Iván, que comenzará el próximo curso segundo de Primaria. Su marido, Luis Manuel Ocón, trabaja como vendedor ambulante mientras ella cuida a una enferma en una casa de Granada. "La ayuda es mucha para los que no tenemos muchos ingresos", dice.

Al contrario de lo que afirma la Administración, asegura que el importe del cheque no cubre la totalidad de los libros que se encargan desde el centro. "El cheque es de poco más de 100 euros, y con eso hay para cuatro o cinco libros, cuando suelen ser más. Además, el gasto en material escolar supone otros 70 u 80 euros, por lo que sigue siendo un desembolso muy alto", aclara Delgado.

Editores y libreros poco satisfechos

Los representantes de los editores españoles y andaluces se reunieron con la consejera de Educación, Teresa Jiménez, el pasado 2 de junio, para firmar un convenio que hará posible la gratuidad de los libros de texto a lo largo de los próximos cinco años. Entre los puntos que han hecho posible el acuerdo, se encuentra la fijación de una cantidad máxima por los libros de texto para cada uno de los cursos, en lo que se denominan módulos económicos.

De este modo, los de primer ciclo de Primaria no podrán superar los 120 euros; los de segundo ciclo, los 135 euros; y los de tercer ciclo podrán llegar hasta los 140 euros. Estas cantidades son superiores en Secundaria. En primero y segundo de ESO se contemplan 220 euros, mientras que en los dos últimos cursos, tercero y cuarto, la cantidad asciende a 240 euros. Con estas cifras en la mesa, el programa de gratuidad supondrá para el curso 2008-09 una inversión de 100,3 millones de euros. Antes de finalizar cada curso, los editores comunicarán a la Consejería de Educación sus propuestas de precios, que serán incluidas en el soporte informático para la gestión del programa (denominado Séneca), con el objeto de que los centros estimen y cuantifiquen el gasto total.

En opinión de José Moyano, presidente de la Asociación Nacional de Editores, el acuerdo suscrito con Educación constituye "un mal menor", ya que considera que el sistema empleado para subvencionar los libros de texto en Andalucía no es digno "de un país con nuestro nivel de desarrollo". Moyano opina que el mejor método es la ayuda directa a las familias para que adquieran sus libros. El sistema de ayuda directa está implantado en Madrid, Asturias, Cantabria, Murcia, Comunidad Valenciana y Castilla y León. Los cheques-libro funcionan en Andalucía, Castilla-La Mancha, Galicia y Aragón, a las que este año se sumará Navarra. Extremadura, Cataluña y Baleares han creado un banco de libros, del que se benefician centros y familias con dificultades, sin que existan ayudas globales.

El gremio de los libreros tampoco se verá beneficiado por la medida. Además de tener que soportar una mayor carga de trabajo, los libreros denuncian que el precio fijado por la Junta y los editores no tiene en cuenta la demora que sufrirán en los pagos. "Antes cobrábamos en efectivo. Ahora, los cheques los pagan los institutos, algunas veces con meses de demora", explica Jacinto Jiménez, responsable de Babel, la mayor librería de Granada. Los libreros reconocen haber tenido que ceder una parte de sus márgenes de negocio por la puesta en marcha del cheque-libro.

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