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Crítica:XIII FESTIVAL DE JEREZ
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Eva decantada

Ante el estreno de su nueva obra, la bailaora había anunciado la presencia de la melancolía y del desamor, como también había prevenido de su diferencia con creaciones anteriores. La exposición de su propuesta nos desveló algo más. En la búsqueda de trascendencia para su trabajo y de perseguir sentimientos propios, que a la postre son universales, también indagó en la soledad, hizo un guiño a una pretendida alegría, que no logró disipar la atmósfera de gravedad, y, sobre todo, ahondó en su universo expresivo, que ofreció de una manera depurada, con una decantación de todos los elementos que acompañan su baile.

A Eva Yerbabuena le gusta buscarse en territorios fronterizos, pero termina encontrándose en la raíz del cante más antiguo. Utiliza recursos y hallazgos de otras danzas que pueden ser reconocibles, pero sobre ellos se impone su cuerpo como la herramienta principal con que expresar los sentimientos. Sobre él ejerce un dominio que traslada al reducido y selecto cuerpo de baile, al que somete a una exigente disciplina coreográfica y convierte en una extensión de sí misma. Se rompe de dolor en ese silencio que "hace daño cuando es puro", y se desgrana en un sin fin de bailes cuando le cantan.

LLUVIA. EVA YERBABUENA BALLET FLAMENCO

Baile, Coreografía e idea original: Eva Yerbabuena. Cuerpo de baile: Mercedes de Córdoba, Eduardo Guerrero, Irene Lozano, Fernando Jiménez. Cante: Enrique El Extremeño, Pepe de Pura, Jeromo Segura. Guitarras: Paco Jarana (Dirección Musical), Manuel de la Luz. Percusión: Manuel Muñoz "El Pájaro", Raúl Domínguez.

Teatro Villamarta, 27 de febrero.

El baile de Yerbabuena se encuentra en la raíz del cante antiguo
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Con su entrada en escena, descalza y desde el patio de butacas, compuso una imagen evidente de desolación, perdida entre una legión de transeúntes. El trémolo obstinado de la guitarra de Paco Jarana creó la atmósfera inquietante para ese desasosiego. Pero, cuando baile y sentimientos se funden de forma arrolladora fue en la interpretación de la taranta y de la serie de cantes de levante. Eva encadena figuras y se entrega al baile intenso y profundo por el que se la reconoce. La milonga, iniciada con una coreografía para mujeres, atempera, sólo inicialmente, una escena donde reinará de nuevo la soledad de la incomunicación y el desamor, sentimientos que se sirven alrededor de una mesa en torno a la que se construyen figuras esculpidas con cuerpos que se contraponen, juntan y separan. Regresa el trémolo, la duda, y el silencio se llena con las palabras desnudas del poema de Horacio García, escrito para el espectáculo.

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La escena de tanguillos gaditanos antiguos, seguida de las alegrías, supone un paréntesis que no lograr distender la narración. El espectáculo ha sido preparado con luces tenues y colores que van del marrón al gris, con sólo unas notas de mayor calidez. El Extremeño canta y pregunta ¿por qué te vistes de negro? Eva da inicio a su baile por soleá con bata de cola de ese color, y sumergida en una penumbra excesiva, en la que resaltan unos brazos que la guían en la recreación de un baile que es señero en su trayectoria.

Esta vez, de manera acorde con toda la obra, la bailaora opta por una interpretación pausada y comedida que no excluye momentos de emoción ni de regocijo. Nunca ha querido que la encasillen en ese baile y marca la distancias con figuras estáticas o entregándose al bolero y a la canción. El primero, Compromiso, de Machín, se lo sirvió Pepe de Pura. Tras él llegaría Miguel Poveda quien, además, le ofreció el mantón grana antes de entregarle la composición de Manuel Alejandro Se nos rompió el amor. El remate de una obra con un planteamiento creciente que no diluye el clima lluvioso y melancólico con que se anunciaba.

Eva Yerbabuena, el pasado viernes en el estreno de <b><i>Lluvia</b></i> en el Teatro Villamarta de Jerez.
Eva Yerbabuena, el pasado viernes en el estreno de Lluvia en el Teatro Villamarta de Jerez.JARO MUÑOZ

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