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Reportaje:Signos

Mito y realidad de Sánchez Mejías

Un documental recuerda la trayectoria vital del torero y dramaturgo sevillano

Ignacio Sánchez Mejías (Sevilla, 1891-Madrid, 1934) forma parte ya de la leyenda. Torero, dramaturgo y promotor de la Generación del 27, su muerte en la arena dio origen a una de las mejores elegías de la lengua española. Federico García Lorca le inmortalizó en Llanto por Ignacio Sánchez Mejías, un poema cuya grandeza trasciende el paso del tiempo. Su biógrafo Andrés Amorós resumió su importancia de forma taxativa: "Para mí, Ignacio Sánchez Mejías es algo así como Chaplin, Picasso o Lawrence de Arabia: un personaje tan singular que si hubiera nacido norteamericano, ya hubieran hecho muchas películas sobre él". La deuda que el mundo audiovisual tiene con el torero y dramaturgo sevillano parece empezar a pagarse con el documental Ignacio Sánchez Mejías. Más allá del toreo, que se estrenará este año.

Sánchez Mejías era un hombre que evitaba ponerse medallas
"Mucha gente se creía que era un héroe mítico creado por Lorca"
Quedan pocas imágenes en movimiento del diestro
"Sabía que cualquier día la muerte podía llamar a su puerta"
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José Francisco Ortuño ha dirigido este documental, cuya elaboración ha llevado dos años y cuyo coste asciende a 142.000 euros. "Estudié dramaturgia. He escrito y dirigido teatro. Ignacio Sánchez Mejías es un nombre que siempre me ha acompañado. Trajo el teatro psicoanalítico a España. Se cree que si no hubiera sido por él, la Generación del 27 no hubiera existido. Cuando surgió la oportunidad de explorar esa figura y darle un sitio que no había tenido en el audiovisual, no lo dudé y decidí dirigir el documental", comenta Ortuño.

El recuerdo de Sánchez Mejías tiene un enorme poder de irradiación que alumbra en múltiples direcciones. Para muchos aficionados al fútbol, fue uno de los presidentes del Betis y para los amantes de los toros, un diestro que murió tras una grave cogida después de coquetear con el riesgo. "Es una personalidad múltiple. Forma parte de los ámbitos cultural, taurino, futbolístico... Pero en profundidad nadie conoce a esta persona. Yo mismo conocía el poema de Lorca y sabía que Sánchez Mejías escribió obras de teatro, pero poco más...", dice el director.

El propio Sánchez Mejías era un hombre que parecía huir de protagonismos huecos, que evitaba ponerse medallas, que gustaba de situarse en un rincón para que otros lucieran sus galas bajo la luz de los focos. La célebre reunión en Sevilla de los componentes de la Generación del 27 -encuentro que dio nombre al grupo poético- fue por iniciativa de Sánchez Mejías con motivo del 300º aniversario de la muerte de Góngora. "Curiosamente, Sánchez Mejías fue un hombre discreto. A pesar de que le gustaba la vida social, se mantenía en un segundo plano. Le gustaba permanecer al margen", señala Ortuño.

Este mismo rechazo del protagonismo, junto a la evidencia de una capacidad inusitada de hacer cosas y estar en distintos sitios, parece contribuir a su mitificación. "Es una figura que roza la leyenda. Mucha gente se creía que era un héroe mítico creado por Lorca. Se mueve en un terreno tal que mucha gente dudaba de que haya existido. Tras haber hecho muchas cosas, se mantiene en un segundo plano", agrega. "Una de nuestras tareas al elaborar el documental fue separar el grano de la paja. Si Sánchez Mejías hizo diez, cuentan que hizo cien. Hemos intentado darle su justa medida, darle a cada uno lo que es de cada uno y a Sánchez Mejías lo que es de Sánchez Mejías", dice Ortuño.

Entre los entrevistados en el documental figuran María Teresa Sánchez Mejías y Pepe Sánchez Mejías, hija y sobrino-nieto del torero; Andrés Amorós; el crítico taurino Manuel Molés; la presidenta de la Fundación García Lorca, Laura García Lorca; y el concejal y autor del libro El Betis y Sevilla, Emilio Carrillo.

El documental se encontró con un problema: la escasez de imágenes en movimiento con sus logros taurinos o su vida social. A diferencia de lo que ocurre con otros toreros contemporáneos suyos como Joselito o Belmonte, de Sánchez Mejías hay muy pocos recursos audiovisuales. La familia Sánchez Mejías puso al servicio de la productora todo el archivo fotográfico del que disponían, algo que ha sido fundamental a la hora de rodar el documental. "El problema que hemos tenido es que hay pocas imágenes. Quizás por eso es un gran desconocido. Tenemos, en cambio, imágenes de la cogida de Joselito, que le dio la alternativa. Sánchez Mejías se casó con su hermana. Hay un vacío documental. Esperamos rellenar ese pequeño hueco", afirma el director.

La vida -con su sublimación perfecta en el arte- y la muerte son los dos polos que determinaron la existencia del diestro, algo que el documental busca recalcar. Eros y Tánatos tienen en el corazón de Sánchez Mejías un pálpito primario y esencial. "Son los dos hilos conductores. Hemos intentado seguir dos elementos que constantemente formaban parte de su vida. Si se mira a Eros, Sánchez Mejías fue un hombre que vivió una vida intensa. A la vez que disfrutaba apasionadamente de la vida, la muerte le rondaba y formaba parte de su entorno. Sabía que cualquier día la muerte podía llamar a su puerta", señala el director.

Consciente de la vocación vanguardista del teatro de Sánchez Mejías, Ortuño ha intentado "hacer un documental atractivo e innovador en el que se utilizan las últimas tecnologías". Ignacio Sánchez Mejías. Más allá del toreo ha sido producido por La Claqueta Metálica y Canal Sur Televisión con el apoyo de la Consejería de Cultura.

Ignacio Sánchez Mejías, en su juventud, en una fotografía del archivo de su familia.
Ignacio Sánchez Mejías, en su juventud, en una fotografía del archivo de su familia.

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