Salud ahorrará ocho millones con la entrega en hospitales de 250 fármacos

La Consejería de Salud prevé ahorrar ocho millones de euros con la dispensación en los hospitales de todos los medicamentos (alrededor de 250) de tratamientos oncológicos y de fertilidad que hasta ahora se dispensaban en las boticas. Según Salud, el principal objetivo del cambio no es económico, sino mejorar el control sobre estos grupos de fármacos, pero el sector farmacéutico lo ha recibido como un nuevo ataque directo de la Consejería a sus intereses.

La medida ha quedado regulada mediante una resolución firmada el 22 de diciembre por el gerente del Servicio Andaluz de Salud (SAS), José Luis Gutiérrez. El texto establece que las peculiaridades de estos fármacos aconsejan "su utilización segura y, por tanto, que su dispensación en el SAS se reserve a sus centros hospitalarios". Entre otras características, la resolución recuerda su "elevada toxicidad" y la "necesidad de ajustes de posología a lo largo del tratamiento y sus interacciones con otros fármacos".

Compra directa

Un portavoz de la Consejería explicó que el 90% de los medicamentos oncológicos y de fertilidad ya eran de dispensación hospitalaria, por lo que la resolución afecta a alrededor de un 10% de los fármacos de este tipo. Los ocho millones de euros que, según estimaciones de Salud, se ahorrará el SAS surgen de la compra directa al laboratorio, lo que evita los costes de distribución y el porcentaje correspondiente a las farmacias. También podrá negociar descuentos con las fabricantes por comprar grandes cantidades de un fármaco.

La decisión, según Salud, se pactó hace meses con los médicos y los farmacéuticos hospitalarios, que se mostraron a favor. Las mismas fuentes aseguran que se comunicó el 10 de febrero de 2010 al Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Farmaceúticos (Cacof), aunque fuentes de este organismo negaron tal comunicación y afirmaron que, ni siquiera ayer, tenían constancia oficial de la resolución del SAS.

A los farmacéuticos no les gusta la medida, que entrará en vigor el próximo 22 de enero, aunque declinaron pronunciarse oficialmente sobre ella. Fuentes del Cacof sí que explicaron que el descontento viene tanto por la merma económica como por el hecho de que Salud dé un paso más dentro del pulso que mantiene con el sector.