La defensa de un lugar mágico
Asociaciones exigen que se extreme la protección sobre los Jardines de Forestier
Los Jardines de Forestier son un enclave de belleza y sosiego situado en Castilleja de Guzmán, a pocos kilómetros de Sevilla. Los jardines fueron diseñados y construidos bajo la dirección del arquitecto francés J. C. N. Forestier (1861-1930) a finales de los años veinte. Están declarados Bien de Interés Cultural (BIC) y tienen una superficie de 26.000 metros cuadrados.
Desde la balaustrada que culmina los jardines hay una vista de Sevilla que justifica el paseo. La Giralda e Isla Mágica trascienden las leyes del tiempo como dos hitos que dominan la trama del casco urbano. Lomas y olivos bajan hacia la ciudad en un descenso suave, lleno de colores. La joya construida por Forestier luce caprichos arquitectónicos y arbóreos que abren puertas a los placeres de la mente y los sentidos. Jacarandas, cipreses, parterres, fuentes y bancos de azulejos sirven de preámbulo a la explosión de belleza de una pérgola que convoca a festejos y confidencias.
Cultura señala que la joya de Castilleja de Guzmán no corre peligro
Cuatro grupos han lanzado una llamada en defensa de los jardines. La Plataforma Ciudadana Forestier de Castilleja de Guzmán, Valencina Habitable, la Asociación en Defensa del Territorio del Aljarafe y Aljarafe Habitable denuncian que los Jardines de Forestier "quedan fuera del Parque Cultural del Aljarafe Norte". "Así lo recoge el Plan de Ordenación del Territorio de la Aglomeración Urbana de Sevilla (Potaus) tras ser aprobado por la Comisión de Ordenación del Territorio y Urbanismo de Andalucía (Cotua) el pasado diciembre", señalan en un comunicado. El Potaus es diseñado por la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio. El Parque Cultural del Aljarafe Norte estará, en principio, integrado por la ciudad romana de Itálica, el Monasterio de San Isidoro del Campo, el yacimiento calcolítico de Valencina de la Concepción y Castilleja de Guzmán y el yacimiento arqueológico de El Carambolo.
"La inclusión de un BIC en un parque cultural desde el Potaus supone que va a ser objeto de una serie de actuaciones para contribuir al fomento de su uso público. Estas actuaciones deben ser definidas por la Consejería de Cultura, que es la administración sectorial competente. (...) Cabe recordar que, cuando la Consejería de Cultura culmine el expediente del Parque Cultural del Aljarafe Norte, puede incluir los Jardines de Forestier en el mismo", sostiene la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio. Y recalca que el recinto "no forma parte del Parque Cultural del Aljarafe Norte porque la Consejería de Cultura es la administración sectorial y no lo ha solicitado". "La Consejería de Cultura todavía tiene margen para hacer esta solicitud si lo considera pertinente, ya que al Potaus le queda el trámite de la aprobación definitiva en el Consejo de Gobierno. Si la Consejería de Cultura lo solicita, se incluirá en el Parque Cultural del Aljarafe Norte", agrega una fuente de Vivienda y Ordenación del Territorio.
Isabel Medrano, presidenta de la Plataforma Ciudadana Forestier de Castilleja de Guzmán, recuerda que "los jardines son un BIC, al igual que lo son Itálica, el Monasterio de San Isidoro o los dólmenes". "Y, sin embargo, estos tres últimos ejemplos están dentro del Parque Cultural del Aljarafe Norte. En el entorno protegido de los Jardines de Forestier quieren construir un área de oportunidad hotelera. No es lógico que los Jardines de Forestier queden fuera del Parque Cultural del Aljarafe Norte. Creemos que hay intereses que no se desvelan", comenta Medrano.
El delegado provincial de la Consejería de Cultura en Sevilla, Bernardo Bueno, señala que esta institución es la que "tiene la responsabilidad de llevar adelante la figura de parque cultural". "Todo el patrimonio que existe en la zona estará dentro del parque cultural. Los Jardines de Forestier estarán protegidos, como ya lo están por su declaración de BIC", concluye Bueno.
La Junta asegura, así, que no hay peligro para los Jardines de Forestier. Con todo, insistir en la defensa de este oasis es una misión que agradecerán las generaciones del futuro.
