_
_
_
_
_

El fiscal ve delito en las amenazas de una menor a su profesora

Los insultos y amenazas que una menor de 14 años profirió contra una profesora de su instituto, que le dijo que debía volver a clase, pueden costarle dos años de libertad vigilada y 8.000 euros de indemnización. La Fiscalía de Menores de Granada califica lo ocurrido como un delito de atentado contra funcionario público y otro de lesiones, por el daño psicológico que le causó a la docente, ya que en ningún momento llegó a producirse contacto físico entre ambas.

Los hechos ocurrieron en febrero de 2008 en un instituto de la capital granadina. Ese día, la víctima tenía encomendada la misión de vigilar que no pasearan por los pasillos del centro alumnos que debían estar en clase. La menor, que ya era "conflictiva", se cruzó con ella camino de la cafetería. "¿Dónde vas?", le preguntó la docente, que de inmediato le conminó a volver a clase.

No le gustó a la chica lo que le comentó esta profesional y su respuesta fue desafiante. La explicación que le exigió entonces su profesora debió sentarle peor. La alumna le contestó, según fuentes de la Fiscalía de Menores, que "callara" y que "iba a soñar con ella". Acto seguido, la chica amenazó a la profesora y le dejó claro que tarde o temprano "se verían en la calle". El enfrentamiento fue verbal, y sólo eso, pero la docente quedó bastante afectada por este incidente y las amenazas de la menor.

Todo transcurrió mientras ella desempeñaba su trabajo en un instituto de Secundaria. Y puesto que tiene categoría de funcionario público, igual que los médicos, los fiscales pueden calificar como atentado a la autoridad estos hechos. No es necesario que se llegue a emplear la fuerza hacia la víctima o exista agresión física. La intimidación, amenaza o resistencia pueden ser consideradas delito.

Y es que en esta ocasión hubo más. El enfrentamiento verbal le produjo a la docente depresión, crisis de ansiedad, estrés postraumático, taquicardias e hipertensión, entre otras consecuencias. De todo ello tardó en curar 180 días, tiempo durante el cual necesitó estar de baja y precisó tratamiento médico.

La defensa de la chica pide la absolución. Su abogado no cree que la chica haya cometido delito, según publicó ayer Ideal.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_