Seis grados más en Sierra Nevada y Cazorla

Andalucía es una de las regiones donde se prevé que el cambio climático tenga unos efectos más evidentes, según pronostican los expertos internacionales en este fenómeno, que ya pocos niegan o desvinculan de la acción del hombre sobre el planeta. El Gobierno regional aprobó la semana pasada el Programa Andaluz de Adaptación al Cambio Climático, que pretende adelantarse a las transformaciones y buscar alternativas para el futuro.

Este plan se basa en los denominados mapas de escenarios de cambio climático, elaborados por Medio Ambiente y que se centran en la evolución del clima durante el siglo XXI. Estos mapas proyectan las variaciones en las temperaturas máximas y mínimas y en las precipitaciones a lo largo de este siglo.

Las capitales del interior sufrirán más el aumento de las temperaturas

La Consejería de Medio Ambiente prevé que las áreas de Andalucía en las que las temperaturas experimentarán un mayor ascenso serán las de montaña. Se estima que en algunas zonas de Sierra Nevada y Cazorla las mínimas medias aumentarán más de seis grados en 2100. Las temperaturas máximas experimentarán incrementos de más de ocho grados. El programa de adaptación al cambio climático aprobado esta semana contempla la realización de planes de "reconversión" de los espacios de alta montaña que se verán afectados por este ascenso de las temperaturas.

En Sierra Nevada, por ejemplo, el esquí es una importante fuente de ingresos. La zona está catalogada como Reserva de la Biosfera y ha sido seleccionada por la Unesco como uno de los diez puntos de estudio del proyecto Glochamost, que investigará el desarrollo del cambio climático y buscará formas de adaptación a este fenómeno.

Respecto al conjunto de Andalucía, lo previsto en las proyecciones que maneja la Junta es que las temperaturas medias máximas aumenten entre 3,15 y 5,28 grados a finales de siglo. Y las mínimas crecerán entre 2,4 y 3,85 grados de media.

Las proyecciones que utiliza Medio Ambiente se obtienen cruzando los modelos internacionales de simulación climática con los distintos escenarios de emisiones de gases de efecto invernadero generados a partir de previsiones de desarrollo de la actividad humana. Así, en el escenario más amable de emisiones y de evolución (el llamado B2), se prevé que aumente 3,15 grados centígrados la media de las temperaturas máximas en Andalucía entre 2091 y 2100. El escenario de desarrollo menos optimista (A2) augura un incremento de 5,28 grados.

Respecto a las temperaturas mínimas en Andalucía, el escenario B2 prevé para la última década de este siglo que la media aumente 2,4 grados y el A2, 3,85 grados.

Estas proyecciones se obtienen con la aplicación del modelo de simulación climática desarrollado por el Servicio Meteorológico y de Medio Ambiente de Canadá, que es uno de los que se suelen utilizar en las investigaciones internacionales de este fenómeno. Este modelo, en el caso de las proyecciones realizadas por la Junta, se aplica sobre dos tipos de escenarios de emisiones de gases de efecto invernadero. El más pesimista (A2) y en el que, por tanto, se estima que habrá más calentamiento global, prevé un comportamiento humano bastante similar al actual en el que la población mantiene un continuo crecimiento.

El escenario más halagüeño (B2) contempla un crecimiento de la población mundial más moderado y una mayor preocupación por la sostenibilidad.

Respecto al incremento de las temperaturas, los dos escenarios empleados -A2 y B2- presentan un alza bastante parecida hasta la década de los cincuenta de este siglo. A partir de ese momento es cuando el escenario A2 -que contempla un desarrollo de la actividad humana similar al de ahora- se distanciaría y las temperaturas experimentarían un aumento mayor que en el B2.

El estudio de Medio Ambiente también identifica los municipios en los que se prevé que las temperaturas máximas asciendan más. Iznalloz, una localidad de la Sierra Arana granadina, será la que sufra un mayor incremento, 5,9 grados más que ahora en la última década del siglo XXI.

Respecto a las capitales andaluzas, las ciudades de interior serán las que sufran más las consecuencias del calentamiento global. Para finales de siglo, se prevé que la temperatura media en Jaén sea 4,46 grados centígrados más alta, la de Granada, 4,37 y la de Córdoba, 4,01.

Por el contrario, Málaga es la capital en la que se estima que menos subirán las temperaturas medias, 2,8 grados centígrados más que ahora. En Cádiz se pronostica un incremento de 3,1 grados y en Huelva, 3,35.