Los paisajes del recuerdo

Roma-Río de Janeiro-Sevilla, en este triángulo se desarrolla Geometría de la distancia, la exposición que inauguró ayer en Sevilla Patricio Cabrera. La muestra, en la Galería Rafael Ortiz, es un ejercicio mental en el que el artista -uno de los que cambió el panorama nacional a mediados de los ochenta desde la llamada Nueva Figuración Sevillana- hace un ejercicio mental para trabajar en sus paisajes a través del recuerdo.

"Siempre hay una distancia que nos separa de las cosas, de los lugares que habitamos. A veces tienes más presente un paisaje del recuerdo que el que estás mirando", explicó ayer Patricio Cabrera (Gines, Sevilla, 1958) para que el espectador pueda entender las idas y venidas de las 15 obras -la mayoría collages- y 19 dibujos que ha reunido en esta muestra.

El lenguaje geométrico y los colores brillantes se han acentuado en su nueva producción, en la que aparecen, por primera vez, obras tridimensionales. "Son cajas, una especie de teatrito con un dibujo muy definido y muchas escaleras. La escalera es un símbolo de algo que te lleva a otro lugar, un símbolo del tránsito", apunta el artista quien el pasado martes obtuvo el Premio de Artes Plásticas El Público, un galardón que concede Canal Sur Radio desde hace 13 años y que reconoce el trabajo del último año de los creadores andaluces.

Todas las obras de Geometría de la distancia, que podrá verse en Sevilla hasta el 18 de febrero, están realizadas en 2011, durante su estancia en la Academia de España en Roma, con una beca del Ministerio de Asuntos Exteriores, en Río de Janeiro, donde se instaló el pasado septiembre, y en su estudio de Gines. El artista, con obras en las colecciones de la Fundación La Caixa, el Centro de Arte Reina Sofía o el Museo de Arte Moderno de Barcelona, apuesta en esta ocasión por técnicas nuevas para él como el papel recortado, las cajas de madera y las composiciones de gomaeva (material similar a la plastilina).

"Siempre he querido sacar las pinturas del cuadro y creo que mi paso por Roma ha sido el empujón que necesitaba para hacerlo", comenta Cabrera quien se ha inspirado en el libro Tratado de la lejanía, de Antonio Prete, para crear este nuevo universo en que aparece reiteradamente atardeceres sobre el lago de Araçatiba, un lugar muy cerca de Río de Janeiro al que planea volver, e instalarse, dentro de tres meses.