_
_
_
_
_

La tranquilidad de Cajasol y CajaGranada

"El jefe está muy tranquilo, no te creas". "Pues yo lo veo más relajado que hace una semana". La noticia de la fusión, o mejor dicho, absorción de Caja de Jaén por parte de la poderosa Unicaja, ha rebajado la tensión de los presidentes de Cajasol y CajaGranada, las otras dos entidades que junto a Cajasur participan en el juego de las fusiones. Eso es, al menos, lo que colaboradores muy cercanos a Antonio Pulido y a Antonio María Claret García afirmaban al ser interrogados por los posibles movimientos de las cajas de Sevilla y Granada. "La presión la tiene ahora Cajasur", afirman desde Cajasol y CajaGranada.

Y es que la tensión en Cajasol se ha relajado bastante, o eso es al menos lo que se manifiesta desde su dirección. No sólo por la lejanía con la que se ve una posible nueva fusión, sino por la última reforma interna de la cúpula directiva realizada a mediados de junio. "La gente parece más motivada y los deberes internos se están cumpliendo. Hemos bajado un punto la morosidad en el último mes. Y se han acometido nuevas iniciativas que están funcionando. De los deberes externos ya nos ocuparemos". Ése es el mensaje que se traslada desde la caja sevillana que, no obstante, sigue sopesando y haciendo números sobre posibles alianzas fuera de Andalucía. "Tenemos tiempo, habrá que ver como llega el otoño, y luego tomar las decisiones. Ahora no nos vamos a meter en ningún lío", se afirma desde Cajasol.

En CajaGranada, sin embargo, el debate está algo más crispado. La caja estaba expectante a una posible fusión con Jaén, planteada desde hace cuatro años, y la noticia del pacto con Unicaja le ha hecho replantearse estrategias. Además, su incursión semiclandestina para intentar un acercamiento a Cajasur, además de no obtener fruto le costó una reprimenda.

La caja granadina está preocupada por los debates abiertos en la ciudad, que advierten de la lejanía con que se mira a la Junta desde Granada. Los sectores más reaccionarios atrincheran además a CajaGranada en una barricada solitaria. Desde esta entidad se insiste en un detalle y se pregunta: ¿Cómo quedaría la potente apuesta por la obra social de CajaGranada y qué papel se reservaría a su obra estrella, el Centro de la Cultura y de la Memoria de Andalucía en una posible fusión? La llave del cubo del río Genil puede ser la clave de un futuro entendimiento.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_