_
_
_
_
_
Reportaje:TEATRO | Reportaje

Los cuentos de Pirandello

Javier Vallejo

Cuánto cuento tiene Pirandello! Se propuso escribir 365, y publicarlos bajo el título Cuentos para un año, pero se plantó cuando rondaba los 250. Muchos los llevó al teatro, alguno con billete de ida y vuelta: después de estrenarlos los reescribía. Su vida, como la de Chéjov, osciló entre la literatura y las tablas. Del celebérrimo El hombre de la flor en la boca, por ejemplo, dio una versión a los cómicos y tres a la imprenta, con títulos diferentes. Tantas voces..., espectáculo que se estrena en Madrid la semana próxima, reúne cinco de sus relatos mejores, adaptados por Juan Carlos Plaza Asperilla y dirigidos por Natalia Menéndez.

'La casa de Granella', el primero de ellos, es puro cine. Empieza con una panorámica del bufete del abogado Zummo (Juan Ribó), en cuya sala de espera está la angustiada familia Piccirilli; y concluye con un travelling colina arriba, hasta el oscuro descampado de la casa encantada, donde seguimos a su propietario por las habitaciones vacías y silentes, escuchando el batir agitado de su corazón. "En este relato popular, uno de los muchos que a Pirandello le contó Maria Stella, su niñera, hemos incluido el episodio de la sesión de espiritismo de El difunto Matias Pascal, su gran novela", dice Juan Carlos Plaza Asperilla.

El adaptador ha tomado a Ficarra e Picone, dúo cómico siciliano, quizá el más famoso de la Italia de hoy, como modelo de dos personajes de nuevo cuño que, en este espectáculo, encarnan al pueblo, omnipresente en el relato original. "Zummo, cada vez más interesado en el lado paranormal del caso Piccirilli, es un personaje gemelo del raissonneur de Así es si así os parece: Pirandello habla por su boca".

Aquejado de un epitelioma de pronóstico letal, el protagonista de 'El hombre de la flor en la boca', segundo relato de Tantas voces..., decide odiar a la humanidad de forma metódica e implacable, para perder su apego a la vida. "Si he de morir", piensa, "que sea deseándolo". "Todos sus intérpretes, Vittorio Gassman incluido, asumen literalmente la decisión del personaje, ignorando un dato clave: que la proximidad de la muerte le duele y le hace vulnerable", observa Plaza. "José Luis Patiño, gran actor, y Natalia Menéndez han sabido verlo. El hombre del epitelioma tiene un interlocutor callado cuya presencia es fundamental: como la de la Señorita Y en La más fuerte, papel mudo que en una interpretación memorable de Blanca Portillo adquiría carácter protagonista".

Andrea D'Odorico, productor y escenógrafo de este espectáculo, llevaba largos años acariciando la idea de hacerlo. "En 1995 me habló de ello por primera vez", recuerda Natalia Menéndez. Desde 1978, cuando puso en pie Los gigantes de la montaña, dirigido por Miguel Narros, D'Odorico ha alentado la producción y creado el espacio escénico de media docena de obras de Pirandello, entre ellas, Seis personajes en busca de autor y Así es si así os parece. "Los cinco cuentos que hemos escogido ofrecen un escáner completo de la condición humana", dice el escenógrafo. "Limones de Sicilia', el tercero, está inspirado en La traviata. Su protagonista femenina, cantante prostituta de lujo (Lara Grube), es un trasunto de Lina Cavalieri, soprano guapísima de voz regular, pero excelente actriz, que cosechó grandes éxitos por ser amante del rey".

"Ninguno de los personajes de este cuento lleva la vida que querría", apunta Plaza. "Según Pirandello, ante la máscara que la sociedad nos impone podemos reaccionar de tres maneras: aceptándola, como hacen los protagonistas de 'Limones de Sicilia'; arrancándonosla, lo que conduce al suicidio, a la muerte violenta o a la locura, como en Enrique IV; o intentando sacarle partido, como hace Chiàrchiaro, el gafe de 'El certificado".

En este relato, el compasivo juez D'Andrea llama a Chiàrchiaro para persuadirle de que retire una querella por difamación interpuesta contra dos jóvenes que hicieron la higa a su paso, convencido de que serán absueltos y él será confirmado como gafe. Pero precisamente eso es lo que Chiàrchiaro desea. Tras ser despedido del banco con la excusa de que, estando él, nadie abrirá una cuenta, la única posibilidad que ve de alimentar a su familia es rondar casinos y comercios: "Una vez sentenciado que soy gafe, me pagarán para que me largue", le dice al juez. "Ésta es la aportación de Pirandello a la teoría de las paradojas: para ganar un caso, hay que perderlo", observa su traductor.

'Muerte en el hotel', el último relato, es una encrucijada fatal de miedos y supersticiones. "En Tantas voces... el público descubrirá a un Pirandello accesible, sarcástico, con un humor cambiante, interpretado por siete actores que se desdoblan en cuarenta personajes para hablarnos de la creencia en el más allá, el rechazo del diferente, el engaño y el amor roto", dice Natalia Menéndez. "La música de Luis Miguel Cobo y la coreografía de Marta Gómez enlazan mágicamente unos cuentos con otros". Lola Casamayor, Fidel Almansa y Antonio Zabalburu completan un reparto de muchos quilates.

Tantas voces... Del 17 de abril al 10 de mayo. Madrid. Matadero/Naves del Español. www.mataderomadrid.com/

Representación de <i>Tantas voces...</i>, de Pirandello, con dirección de Natalia Menéndez y escenografía de Andrea D&#39;Orico.
Representación de Tantas voces..., de Pirandello, con dirección de Natalia Menéndez y escenografía de Andrea D'Orico.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Javier Vallejo
Crítico teatral de EL PAÍS. Escribió sobre artes escénicas en Tentaciones y EP3. Antes fue redactor de 'El Independiente' y 'El Público', donde ejerció la crítica teatral. Es licenciado en Psicología, en Interpretación por la RESAD y premio Paco Rabal de Periodismo Cultural. Ha comisariado para La Casa Encendida el ciclo ‘Mujeres a Pie de Guerra’.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_