_
_
_
_
_

Casi 20.000 jóvenes llevan meses esperando la ayuda al alquiler

El Ministerio de Vivienda alega problemas informáticos para el retraso

Lluís Pellicer

Casi 44.000 jóvenes catalanes han pedido desde enero de 2008 la renta básica de emancipación, la ayuda al alquiler de 210 euros mensuales que da el Ministerio de Vivienda. De todas las solicitudes, se resolvió que 38.986 tenían derecho a acceder a esta subvención. Pero hasta ahora sólo el 48% de los demandantes catalanes lo ha recibido, cuando la media de jóvenes que han accedido a la ayuda en el conjunto de comunidades supera el 65%. El síndic de greuges, Rafael Ribó, ha puesto en marcha una investigación de oficio ante las más de 300 reclamaciones que ha recibido en los últimos meses.

Sólo 18.989 catalanes recibieron hasta el 30 de junio la renta básica, una ayuda a la que tienen derecho los jóvenes de entre 22 y 30 años que ingresen menos de 22.000 euros anuales. La proporción es muy baja si se compara con otras comunidades. En el País Vasco la han recibido ya el 81% de los demandantes, mientras que en Canarias, la segunda más rezagada, la han obtenido el 62,3% de los que las pidieron.

El Síndic investiga el motivo de la demora tras recibir más de 300 quejas

Un portavoz del Síndic de Greuges explicó ayer que la actuación de oficio todavía está a medias, y agregó que ya se ha puesto en contacto con el Defensor del Pueblo, puesto que el pago lo realiza el Ministerio de Vivienda a pesar de que el encargado de tramitar la subvención es el Departamento de Medio Ambiente y Vivienda de la Generalitat. De momento, el Síndic ha recibido más de 300 quejas de jóvenes que llevan meses sin percibir las ayudas del ministerio.

El departamento que dirige Beatriz Corredor admite el retraso en el pago de estas subvenciones y lo atribuye a complicaciones con la fórmula mayoritaria que se usa en Cataluña para pagar el alquiler. Fuentes del ministerio explicaron que en Cataluña los alquileres se abonan sobre todo por domiciliación bancaria, mientras que en el resto de España se realizan por transferencia.

El proceso, explicaron desde el ministerio, es el siguiente: el joven presenta la solicitud; la comunidad autónoma la acepta o la deniega; si da el visto bueno, dicta una resolución que se lleva al banco; éste comprueba que se paga el alquiler mediante transferencia, y luego pasa el expediente al ministerio, que abona el alquiler.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

El sistema funciona bien si se paga al casero a través de una transferencia. Si se realiza mensualmente con una domiciliación bancaria, el inquilino debe mandar el recibo al ministerio. Y según estas fuentes, éste es el problema: ya no pasa al sistema del Gobierno de forma telemática, sino que se tienen que ir introduciendo los datos de forma manual. Pero la demora deberá resolverse en otoño, que es cuando Vivienda estima que tendrá en marcha un nuevo sistema telemático a través del cual los bancos podrán sistematizar los datos y para el que se ha requerido un nuevo decreto.

La Generalitat lleva ya meses reclamando el traspaso de todo el proceso de gestión de estas ayudas por el retraso que viene observando en los pagos de los 210 euros. Fuentes del Departamento de Medio Ambiente y Vivienda aseguraron ayer que aún no se ha atendido esta petición.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Lluís Pellicer
Es jefe de sección de Economía de EL PAÍS, donde ha desarrollado la mayor parte de su carrera. Ha sido corresponsal en Bruselas entre 2018 y 2021 y redactor de Economía en Barcelona, donde cubrió la crisis inmobiliaria de 2008. Licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, ha cursado el programa de desarrollo directivo de IESE.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_