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400.000 alumnos inician hoy la primera y última 'semana blanca'

El 80% de las familias mantendrán a sus hijos en casa

Un total de 418.131 escolares catalanes estrenarán hoy la primera semana blanca, que se prolongará hasta el 4 de marzo, antes de la segunda oleada de alumnos -721.191-, mayoritariamente de Barcelona y su área metropolitana, que harán fiesta entre el 7 y 11 el de marzo. Esta semana de fiesta trata de compensar el avance del curso del 15 al 7 de septiembre en una modificación del calendario escolar introducida por el exconsejero Ernest Maragall, que el próximo curso desaparecerá por decisión de la consejera de Enseñanza, Irene Rigau.

CiU ya incorporaba en su programa electoral su decisión de suprimir esta semana de descanso por falta de recursos. La semana festiva se ha planteado desde el Gobierno como cinco días sin actividad lectiva en los que las asociaciones de padres y madres (Ampas) o, en su defecto, los Ayuntamientos han tenido que organizar actividades para los alumnos. Según las Ampas, el 80% de las familias asumirán el cuidado de los niños, ya que no les llevarán a las actividades de ocio programadas por las casas de colonias.

Las estaciones de esquí serán, sin embargo, las grandes beneficiadas del parón escolar. Los hoteles a pie de pista de la mayoría de las estaciones incrementarán hasta un 25% la ocupación hotelera respecto a una semana normal. Joaquim Alsina, gerente de la Asociación Catalana de Estaciones de Esquí y Actividades de Montaña (ACEM), señaló que las dos semanas servirán para compensar un mes de febrero "flojo" y beneficiará a los monitores de esquí.

Las reservas de viajes para destinos clásicos como Eurodisney o Canarias también han aumentado, según el presidente de la Asociación Catalana de Agencias de Viajes (ACAV), Francisco Carnerero, que admitió que aún no puede evaluar el impacto económico por no poder comparar con otros ejercicios. Algunas casas de turismo rural colgarán de forma excepcional el cartel de "completo" algunos días de esta semana.

Uno de los alumnos de la escuela de la Escola Sant Jordi guardando sus libros en la mochila.
Uno de los alumnos de la escuela de la Escola Sant Jordi guardando sus libros en la mochila.JOAN SÁNCHEZ
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