_
_
_
_
_

Bargalló acota el papel de los autores en lengua castellana para Francfort

El Llull pedirá a Vargas Llosa y García Márquez que hablen de literatura catalana

Carles Geli

El director del Institut Ramon Llull (IRL), Josep Bargalló, quiso despejar ayer en el Parlament toda duda ante la Feria de Francfort: los programas destinados a la industria editorial y a la cultura estarán abiertos a todos los creadores, pero en el literario "los protagonistas serán los que se expresan en catalán; si los invitamos nosotros, los autores en castellano vendrán sólo para los diálogos y para hablar de literatura catalana". Y de eso no escaparían ni Vargas Llosa ni García Márquez, a los que la Generalitat ha invitado.

"Queremos explicar nuestra realidad tal como es y sí, somos plurilingües, pero lo que nos hace distintos de los demás es la lengua catalana; sin ella no habría cultura catalana en Francfort", aseguró Bargalló ante la comisión de política cultural del Parlament. Para difundir las letras catalanas, el director del IRL apuntó alto al asegurar que se había establecido contacto con cuatro premios Nobel conocedores de lo catalán para invitarles a participar en Francfort: José Saramago, asiduo visitante de Cataluña; Gabriel García Márquez (para hablar sobre su admirada Mercè Rodoreda), Günter Grass (de quien se mostrará una exposición de sus litografías de paisajes catalanes) y Seamus Heaney (buen lector de Gabriel Ferrater). Sin tener el Nobel, también se ha invitado a Mario Vargas Llosa, incondicional de Tirant lo Blanc.

Bargalló se mostró afable pero contundente: "Las obras de Zafón, Azúa y Mendoza estarán en la caseta de sus editores", afirmó. Ante las preguntas de los representantes del PP y Ciutadans (Antonio Robles, de este último, espetó al director del IRL: "Ha envuelto perfectamente la exclusión cultural sin que se note") para saber qué autores llevará la Generalitat, Bargalló aseguró: "No pregunten más porque no habrá lista institucional de escritores invitados a Francfort" y se remitió a su intervención inicial, cuando habló de la presencia de autores "que estén traducidos a otras lenguas, de todos los géneros, territorios y tradiciones, los que nos pidan las editoriales e instituciones alemanas y, claro, los que quieran venir".

Por dos veces, Bargalló insistió en que la catalana es "una cultura de diálogo; nuestra aportación al mundo es cómo se convive para construir una sola sociedad". Ese discurso de la convivencia será el eje del simposio Una Europa oberta: el cas català, sobre el que Bargalló definió un perfil de participante que coincidiría con el de los ex presidentes de la Generalitat Jordi Pujol y Pasqual Maragall.

Tras afirmar que "se hace y se hará todo lo posible" para incorporar a las instituciones valencianas y que "el aranés no forma parte de nuestro programa de lengua y cultura catalana, si bien el Conselh General d'Aran tendrá un espacio en la caseta institucional", Bargalló informó de que 69 ciudades alemanas tendrán actividades y 70 institutos incluirán un libro de autor catalán como lectura obligatoria. Del programa sólo desveló la existencia de cuatro cenas de cocineros catalanes con estrellas Michelin, preámbulos de otras tantas noches tipo Sonar (música electrónica, multimedia...), y una música "catalana y expresada a veces en castellano o inglés", se apresuró a resaltar.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Carles Geli
Es periodista de la sección de Cultura en Barcelona, especializado en el sector editorial. Coordina el suplemento ‘Quadern’ del diario. Es coautor de los libros ‘Las tres vidas de Destino’, ‘Mirador, la Catalunya impossible’ y ‘El mundo según Manuel Vázquez Montalbán’. Profesor de periodismo, trabajó en ‘Diari de Barcelona’ y ‘El Periódico’.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_