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Condenado un lituano a 34 años de cárcel por el asesinato de dos compatriotas en Bot

Los crímenes están relacionados con la mafia rusa y el narcotráfico

La Audiencia de Tarragona condenó ayer a 34 años y medio de prisión al lituano Adrej Martjanov como autor del asesinato de dos hombres también lituanos entre diciembre del 2001 y enero del 2002 en Bot (Terra Alta). La Audiencia también condenó a nueve años y medio al lituano Egidijus Grizas, de 44 años, como cómplice del segundo asesinato. Un jurado popular los declaró culpables por unanimidad. Los crímenes están relacionados con la mafia rusa y el tráfico de drogas.

El jurado consideró probado que Martjanov y Oleg Makrusin, de 42 años y en paradero desconocido, asesinaron a Igor Antonievich, de 33 años, y Aleksandr Drianyc, de 51, mientras que Grizas solo participó en el segundo asesinato.

La condena arroja luz sobre dos muertes que a principios de la década pasada conmocionaron a Bot, una población del interior de Tarragona de 700 habitantes.

La historia comienza en 2001, cuando Martjanov llegó a Cataluña con Loreta Butkquite, su compañera sentimental. "Ella tenía aquí conocidos de la mafia rusa con los que traficaba con estupefacientes", declaró Martjanov en el juicio. Este y el desaparecido Makrusin vivían con los dos hombres a los que acabaron matando.

La policía considera a Martjanov el jefe de una organización mafiosa en Lituania. Con una furgoneta blanca se dedicaban al reparto de droga en las poblaciones vecinas. La acusación considera probado que el 13 de enero del 2002 Makrusin y Martjanov mataron a Antonievich apaleándolo en la antigua estación de Bot. Se deshicieron del cuerpo arrojándolo por un precipicio de la carretera que une Bot y Prat de Comte. El cadáver fue encontrado a la mañana siguiente. Cinco días antes la víctima había ingresado con heridas de consideración en un hospital. Pese a los consejos de la policía, no denunció el caso.

Los agentes registraron el piso donde vivían todos y se dieron cuenta de que faltaba Drianyc, e iniciaron una investigación.

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Según el veredicto del jurado,el 31 de diciembre del 2001 Martjanov y Makrusin golpearon "cruelmente" a Drianyc. Después, lo trasladaron a una zona montañosa, donde, a sangre fría, lo estrangularon. Tiraron el cuerpo a un barranco. Huyeron a Tortosa y quemaron el coche de la víctima junto al río Ebro. El cadáver fue descubierto el 15 de mayo de 2002. El asesinado llevaba en su cuello una cadena de oro que fue hallada en poder de uno de los detenidos.

En el juicio, Martjanov rechazó las acusaciones. Sobre la función de la furgoneta blanca, cambió su versión varias veces. De una víctima dijo que lo había ayudado a repararla y del otro que lo conocía poco, aunque sabía que tenía problemas con la mafia. En 2010 sostuvo que Grizas, Loreta y Makrusin querían deshacerse de uno de los asesinados porque había descubierto que traficaban con droga. Afirmó que al principio se inculpó para proteger a su compañera sentimental. Ni Martjanov ni Grizas han confesado. Diez años después, el móvil de los asesinatos sigue siendo una incógnita.

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