'Elektra' vuelve al Liceo con Deborah Polaski y Eva Marton
Las mujeres dominan el violento y aterrador mundo de Elektra, la ópera en un acto de Richard Strauss, con libreto de Hugo von Hofmannsthal basado en la tragedia griega de Sófocles, que mañana vuelve al escenario del Liceo tras 18 años de ausencia. Dos sopranos de mucho temperamento, la estadounidense Deborah Polaski y la húngara Eva Marton, protagonizan el nuevo montaje bajo la batuta del alemán Sebastian Weigle. Su director de escena, el belga Guy Joosten, propone "una visión actual y psicológica en un espacio opresivo que potencia el conflicto interior de Electra".
El montaje puede verse desde mañana hasta el 3 de marzo en siete funciones
Ver en acción a Deborah Polaski (Electra) y Eva Marton (Clitemnestra) es uno de los grandes atractivos del nuevo montaje, coproducido por el Liceo y La Monnaie de Bruselas, del que se ofrecen siete funciones hasta el próximo 3 de marzo. En el resto del reparto figuran la soprano alemana Melanie Diener y Ann-Marie Backlund, que se turnarán en el papel de Crisótemis, hermana de Electra, el tenor británico Graham Clark (Egisto) y el barítono alemán Albert Dohmen (Orestes).
La sed de venganza es la única razón de ser de Electra, obsesionada con vengar el horrible asesinato de su padre, el rey Agamenon, a manos de su mujer, Clitemnestra y Egisto, su amante. El director de escena, Guy Joosten, concentra su mirada en las tres mujeres protagonistas -la tercera es Crisótemis, hermana de Electra- a las que sitúa en un austero espacio escénico "cerrado, opresivo, del que es imposible salir".
"El mundo de Elektra es un mundo femenino, gobernado por las emociones, los hombres son elementos problemáticos, cuerpos extraños que hay que mantener alejados todo el tiempo que sea necesario para que se cumpla la profecía de la venganza", asegura el director de escena. "Su presencia es puramente instrumental. Están ahí para matar o ser matados". El montaje establece, según explica Joosten, un paralelismo entre Electra y su madre, que también "es una mujer insatisfecha, herida y falta de amor".
Eva Marton, una de las voces más queridas por el público del Liceo, conoce como nadie los entresijos de esta genial ópera, estrenada en Dresde en 1909, cuyo estreno español tuvo lugar en 1949 en el Liceo. A lo largo de su carrera, la soprano húngara ha encarnado a las tres mujeres protagonistas y, tras ser una de las más cotizadas intérpretes del papel titular -ella fue la gran protagonista del último montaje liceísta, en 1990, firmado escénicamente por Núria Espert y musicalmente por Uwe Mund- vuelve ahora para encarnar a Clitemnestra.
Por su parte, Deborah Polaski asume el gran personaje straussiano tras haber triunfado en el coliseo barcelonés con los principales papeles dramáticos wagnerianos en las últimas temporadas. La producción cuenta con escenografía y vestuario de Patrick Kinmonth e iluminación de Manfred Voss.
