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La Generalitat inicia 12.000 viviendas sociales menos de las previstas

El Gobierno construye 30.000 pisos en cuatro años, cuando prometió 42.000

Lluís Pellicer

La construcción de vivienda social dio un gran salto el año pasado, pero no suficiente para cumplir los objetivos fijados en el Plan de Vivienda 2004-2007, que recogía las promesas del primer Gobierno tripartito. Entonces el Ejecutivo aseguró que aumentaría "la construcción" de vivienda de protección oficial en 42.000 pisos hasta 2007. Sin embargo, en cuatro años se han iniciado 30.115 viviendas, casi el 30% menos. En cambio, se han pulverizado todas las previsiones en materia de rehabilitación: el plan preveía 40.000, pero se han realizado 89.710.

La secretaria de Vivienda de la Generalitat, Carme Trilla, recordó que hay otras 9.174 viviendas en proyecto, lo que suma 39.289 pisos. "Es injusto que nos digan que hemos incumplido lo que prometimos, porque es otra legislatura diferente y las cifras son muy próximas. No es un fracaso", aseguró. Trilla también afirmó que en 2004, en pleno boom inmobiliario, el mercado libre estaba "desbocado", y que era más complicado promover vivienda social. Eso explica, agregó, que no se hayan iniciado viviendas a precio concertado. Éstas pronto empezarán a venderse porque hay que reservar suelo para ellas en los nuevos planeamientos por ley. De hecho, el plan de Vivienda preveía construir 8.000 pisos de precio intermedio en cuatro años, pero apenas se ha levantado ni uno.

El año pasado la Generalitat inició 9.201 viviendas protegidas, el 21,2% más que en el año anterior. Se trata de la mejor cifra de la última década, y se va aproximando a los 12.000 pisos que, según Trilla, se deben levantar con independencia de la marcha del mercado libre.

Los precios bajan el 5%

La secretaria de Vivienda confió en otra circunstancia más para el desarrollo del mercado de vivienda asequible. Las administraciones, las fundaciones sin ánimo de lucro y las cooperativas han sido hasta ahora las más activas en la construcción de vivienda social. "Ahora también están interesadas las empresas privadas", sostuvo. Esto se debe, razonó, al "cambio de tendencia" del mercado inmobiliario. Según el Informe sobre el mercado de la vivienda 2007, los precios de los pisos de obra nueva bajaron el 5% en Cataluña.

El informe de la Generalitat muestra cómo el mercado ha dado un viraje en los últimos meses. "Hay un claro corte a mitades del año pasado", afirmó Trilla. En 2006 todavía se apuntaba una subida de precios del 14%. Pero este año los descensos de los precios de venta (que no de compra) son generales, incluso en Barcelona, donde disminuyeron el 1,9%. La caída fue muy acusada en ciudades como Girona (16,7%), Tarragona (9,6%), Granollers (16,7%) y Mollet (9,4%). Los precios de salida de los pisos usados bajaron el 2%.

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Sobre la firma

Lluís Pellicer
Es jefe de sección de Economía de EL PAÍS, donde ha desarrollado la mayor parte de su carrera. Ha sido corresponsal en Bruselas entre 2018 y 2021 y redactor de Economía en Barcelona, donde cubrió la crisis inmobiliaria de 2008. Licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, ha cursado el programa de desarrollo directivo de IESE.

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