_
_
_
_
_

Resa abrirá dos nuevas residencias universitarias en Barcelona

La empresa prevé una inversión de casi 11 millones de euros

La empresa dedicada a la construcción de residencias para universitarios Resa continúa su fase de expansión. Tras la apertura a principios de este curso de seis residencias en diferentes puntos de España, la compañía inaugurará en Barcelona dos edificios el próximo mes de abril, con una inversión de casi 11 millones de euros (1.800 millones de pesetas). Resa ya cuenta con sendas residencias en Terrassa, Girona y Tarragona, y cuatro en la capital catalana. Su oferta total en España es de 2.985 camas.

Se trata de un modelo que combina las virtudes del colegio mayor y del piso compartido
Los apartamentos, dobles o individuales, costarán de 168 a 360 euros mensuales

Resa inició su actividad en 1992 con el objetivo de exportar su experiencia, desarrollada en Francia, en la construcción de pisos para universitarios con habitaciones individuales y servicios comunitarios. Se trata de un modelo que 'combina las virtudes del colegio mayor y del piso compartido' al que recurren los estudiantes que deben buscar alojamiento, afirma el consejero delegado y vicepresidente de Resa, Juan de Azcárate. Los apartamentos, en régimen de alquiler, son individuales o dobles y disponen de cocina, baño, calefacción, teléfono y conexión gratuita a Internet. Los residentes, que pueden ser tanto estudiantes como profesores, tienen acceso también a salas comunes de estudio, televisión, vídeo y juegos, además de contar con servicios de lavandería, cafetería, gimnasio y vigilancia nocturna en el edificio. Los precios oscilan entre 168 y 360 euros (de 28.000 a 60.000 pesetas) y el periodo de alquiler se adapta a la duración del curso escolar, aunque existe la posibilidad de ampliarlo a un año entero. En ese caso, solamente se cobran 11 mensualidades.

Sin embargo, las dos nuevas residencias en Barcelona traen consigo novedades en este sentido, puesto que buena parte de las plazas se reservarán para estancias cortas y medias y se destinarán principalmente a profesores e investigadores universitarios. 'Queremos poner énfasis en este tipo de oferta', dice el consejero delegado de Resa, que ya en 1998 puso en práctica este modelo en la residencia del Centro Superior de Investigaciones Científicas, que permite alquilar habitaciones por un solo día.

Así, uno de los edificios pendientes de estrenar, situado en el Campus Norte de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), dispondrá de 100 plazas, 30 para estudiantes de tercer ciclo y el resto a modo de aparthotel. Del mismo modo, la mitad de las 150 camas de la residencia que Resa abrirá en la Barceloneta se alquilarán por cortos periodos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Aunque se prevé que las plazas sean ocupadas sobre todo por docentes e investigadores, el nuevo modelo abre también las puertas a estudiantes de otros países que solamente permanecen en España una parte del curso escolar. El resto de las residencias ya prevén la posibilidad de alquilar pisos por un tiempo inferior a los nueve meses que suele durar el curso.

Con la inauguración de estos dos edificios, Resa dispondrá de 3.235 camas en toda España. La presencia de la firma es mayoritaria en Cataluña, donde en estos momentos tiene 1.335 plazas, 'siempre llenas', dice Azcárate. La buena acogida de este tipo de alojamiento para universitarios se refleja en los planes que la empresa tiene entre manos. Mientras se construye un edificio en Madrid y otros dos en el País Vasco, Resa está estudiando una decena de proyectos, cinco de los cuales se llevarán a cabo 'con certidumbre', según el consejero delegado. El próposito de la firma es alcanzar las 5.000 camas en un plazo de cuatro años como mucho, con una inversión de 84 millones de euros.

Resa quiere explotar las posibilidades que ofrece su implantación en diferentes puntos de España, con el fin de favorecer intercambios, de estudiantes principalmente, entre las comunidades autónomas en las que está presente. Aunque este sistema empieza a arrancar tímidamente, Azcárate se muestra convencido de que en un futuro no muy lejano la Universidad se especializará y los estudiantes tenderán a dividir su carrera en ciclos o cursos en diferentes universidades y regiones. Resa aportará su granito de arena con el alojamiento. En el resto de Europa, las previsiones van por el mismo camino. La firma ha empezado a entablar contactos en Italia y el Reino Unido para extender su modelo en estos países.

Resa está participada mayoritariamente por la filial española del grupo francés SCIC. Fue precisamente en Francia donde se empezó a experimentar este modelo en 1985 y donde ya explota una red de 60 residencias públicas y 15 privadas. La exportación del modelo a España obligó a cambiar el modus operandi de la firma por motivos económicos, explica Azcárate, para ofrecer el mismo producto en iguales condiciones. La firma ha recurrido a la concesión de suelo mediante concurso público por parte de las universidades o ayuntamientos por un periodo de 50 años, tras los cuales revierten en ellos el terreno y el edificio. Este ahorro en compra de suelo que repercute en el precio final de alquiler no es necesario en Francia, puesto que los alquileres están muy subvencionados.

Los costes de construcción corren a cargo de sociedades que se constituyen expresamente y en las que participan Resa y entidades financieras locales, como Caixa Catalunya o Caja Rural de Granada. La prestación de los servicios y el personal quedan en manos de Resa, que emplea en sus residencias a más de un centenar de trabajadores.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_