Sants releva a Gràcia bajo la sombra del boicoteo 'okupa'

Tras la clausura de las fiestas de Gràcia, cuyos altercados se han saldado con 14 detenidos -12 menos que en 2007-, arrancan las de Sants "con el corazón en un puño". Así lo aseguran los organizadores del festejo, temerosos del conflicto latente entre el Ayuntamiento y los okupas que organizan la llamada fiesta alternativa. Ambos acumulan meses de discusiones por el espacio reservado a la única verbena ajena a los actos oficiales.

El actor Carles Canut inaugura hoy (20.00 horas) la celebración con el tradicional pregón en el parque de la Espanya Industrial. Un recinto empapelado desde hace semanas con las reivindicaciones del colectivo okupa. Los miles de panfletos esparcidos por Sants aluden a celos municipales ante el éxito de la fiesta alternativa en años pasados: de ahí que el distrito haya rechazado instalarla en el parque de la Espanya Industrial, razona el texto. El distrito considera suficientes los tres días que ha concedido a los alternativos en la plaza de Osca.

"Nosotros estamos en medio", tercian los organizadores, que asumen que los okupas boicotearán los actos oficiales. "Hay tensión por ver qué ocurre. Quizá mañana mismo [hoy para el lector] empiece el jaleo", añaden. Los okupas han confirmado su presencia en el pregón para "informar a los vecinos del problema". También han anunciado varios actos que no disponen de permiso municipal. "Sólo queremos evidenciar que la fiesta alternativa necesita más espacio", señaló un portavoz del colectivo.

La fiesta alternativa también ha abierto brechas en la Fiesta de Gràcia: en su recinto -la plaza del Poble Romaní- se concentraron los enfrentamientos con la policía casi cada madrugada. La federación graciense cerró ayer el festejo con críticas al consistorio por dar permisos a los alternativos sin imponerles responsabilidades. "En nuestra fiesta no ha habido incidentes. Preguntad al Ayuntamiento: él dio los permisos a quienes los han causado", zanjó Ricard Estruch, presidente de la federación.