La cárcel de Trinitat Vella se cerrará en el plazo de un año y medio y se destinará a equipamientos
Clos propone que los solares cedidos para financiar las prisiones se dediquen a pisos sociales
El alcalde de Barcelona, Joan Clos, explicó ayer que la cárcel de Trinitat Vella, de presos jóvenes, será la primera de las tres de Barcelona que se podrá cerrar, y apuntó como plazo alrededor de un año y medio. Esta es una de las cuestiones que se tienen que concretar más en el convenio que suscribirán el Ayuntamiento y la Generalitat y que sustituirá al firmado en 2001 por ambas administraciones. Clos ha propuesto al Departamento de Justicia que destine los solares que cede a la Generalitat para financiar las cárceles -uno en Diagonal Mar- a la construcción de pisos sociales.
El pasado mes de diciembre ambas administraciones ya acordaron la parte principal del traslado de las tres cárceles de Barcelona: la prisión Modelo se trasladaría al polígono de la Zona Franca. Esta nueva prisión, según avanzaron entonces, podría estar lista a finales de 2008. Este plazo, sin embargo, parece difícil de lograr ante el panorama político que se dibuja con unas elecciones anticipadas en otoño y la consecuente formación de Gobierno.
El acuerdo de diciembre señalaba que el centro de régimen abierto, con capacidad para 300 internos, permanecería en el solar del Eixample. Eso finalmente no será así, según publicó ayer El Periódico de Catalunya. El espacio que ocupa el módulo de régimen abierto que da a la calle de Nicaragua se destinará a equipamientos de barrio, como escuelas o guarderías, explicó ayer Clos.
El Departamento de Justicia no quiso aclarar dónde se construirá el nuevo módulo de régimen abierto.
Ambas administraciones están ultimando un nuevo convenio que sustituya al firmado en mayo de 2001 y nunca ejecutado. De momento, algunas decisiones de aquél han variado por completo. Por ejemplo, no se construirán pisos en el solar que ocupa la cárcel de Trinitat Vella. Clos señaló ayer que se destinará íntegramente a equipamientos de barrio, una carencia muy acusada en esa zona de Sant Andreu, empezando por canchas deportivas y continuando por todo tipo de servicios. Hasta de plazas.
En cuanto a la cárcel de Wad-Ras, todo parece indicar que el módulo de régimen abierto se mantendrá, apuntaron fuentes del Ayuntamiento de Barcelona. Estas mismas señalaron que uno de los flecos que se está acordando es qué ocurre con los dos solares que el consistorio cedió a la Generalitat de forma condicionada al traslado de las prisiones. Eran 13.800 metros cuadrados en dos pastillas de terreno. Una, de unos 10.000 metros, que saldría de la desocupación de Wad-Ras, y el resto en la esquina de Diagonal y Llull, una de las zonas más cotizadas actualmente de la nueva Diagonal. Clos ha propuesto al consejero de Justicia, Josep Maria Vallès, que se levanten pisos de protección pública en ambos solares y no que se dediquen a al sector terciario / hotelero, que era lo previsto inicialmente. Justicia tampoco quiso aclarar ayer este punto.
Otra cosa que tampoco está clara es qué ocurrirá con la edificabilidad de sector terciario que estaba prevista en la Modelo en el convenio de 2001. Fuentes del Ayuntamiento indicaron que se mantiene. Justicia no dijo nada.
Después de la firma del convenio se tendrán que concretar los usos del solar de la Modelo. Lo es seguro es que el panóptico central y los seis brazos se mantienen -están protegidos por el catálogo del Eixample- y en ellos se ubicarán equipamientos. Lo mismo ocurrirá, explicó Clos, con el edificio del módulo de régimen abierto actual que desaparecerá.
Ante la inminencia del cierre del convenio, la tercera teniente de alcalde, Imma Mayol (Iniciativa per Catalunya Verds), rechazó la posibilidad de que en el solar de la Modelo se levante un hotel. La líder ecosocialista apostó por construir, tanto en ese espacio como en la zona de Diagonal Mar, "viviendas protegidas de precio concertado", informa Jesús García. Mayol añadió que su grupo defendió desde el primer momento que el solar de la cárcel acoja equipamientos, aunque matizó que el Ayuntamienªto sí aceptó que se pudieran construir oficinas "en aras de lograr un acuerdo" con la Generalitat.
