El curso empezará antes en las escuelas y habrá vacaciones en febrero
Los colegios catalanes empezarán una semana antes las clases a partir del curso que viene. El arranque de las clases será el 7 de septiembre, martes. Habrá una pausa escolar de una semana a finales de febrero o principios de marzo. El consejero de Educación, Ernest Maragall, anunció ayer que su departamento aprobará el cambio de calendario en pocas semanas una vez escuchado el Consejo Escolar, con el que Maragall se reunió ayer.
Los cambios afectarán a un millón de alumnos catalanes, a sus familias y a las empresas. Por eso, el nuevo calendario escolar será por dos años, para que las familias, las empresas y los profesores se planifiquen, dijeron fuentes del Departamento de Educación.
Se estudia un descanso del 28 de febrero al 4 de marzo o del 7 al 11 de este mes
El Consejo Escolar entregó ayer sus conclusiones sobre el calendario escolar al consejero de Educación. En el Consejo Escolar se sientan las familias de alumnos, los sindicatos y los empresarios. Este órgano llegó a un acuerdo en comisión el mes pasado para plantear el avance del curso y la parada escolar de febrero.
Sobre la jornada intensiva que hacen los centros en junio, la Generalitat propuso el curso pasado suprimirla. Sin embargo, hay división de opiniones en este punto en el Consejo Escolar. Educación prefiere esperar antes de tomar una decisión final en este punto. Los sindicatos quieren que se mantenga y algunas asociaciones de padres también dicen que en junio hace demasiado calor en algunas zonas.
Dentro de unas semanas Educación enviará una propuesta de nuevo calendario al Consejo Escolar. Este órgano dará su opinión y la última palabra la tiene la Generalitat. Sobre los días de descanso de febrero, se estudia dar opción a los centros a elegir entre antes y después de carnaval, es decir, del 28 de febrero al 4 de marzo o del 7 al 11 de marzo. De esta forma, el curso tendrá cuatro periodos de clase en lugar de los tres trimestes actuales: de septiembre a Navidad, de enero a final de febrero o principios de marzo, de marzo a Semana Santa y de abril a junio.
Las nuevas vacaciones de febrero o marzo son las que más polémica suscitan. Familias, empresas y docentes dicen que debe haber actividades extraescolares para todos los alumnos durante la semana en la que no haya clases. De lo contrario, las familias con bajos recursos tendrán dificultades para que sus hijos estén atendidos. Educación asegura que está preparado para el cambio impulsando actividades extraescolares, avanzando la preinscripción y teniendo a punto las plantillas de maestros antes de las vacaciones de verano.
