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La escuela concertada se resiste a acoger a más alumnos inmigrantes

Ni la LOE ni las medidas de la Generalitat han variado el reparto de extranjeros

El reparto de alumnos inmigrantes entre escuelas públicas y concertadas no mejora. Pese a que casi uno de cada tres alumnos catalanes acude a centros concertados -sufragados también con fondos públicos-, sólo el 16,1% de los inmigrantes van a sus aulas. En cambio, el 83,9% de los alumnos extranjeros han empezado este curso en centros públicos.

De los 152.000 extranjeros matriculados, 127.500 lo han hecho en centros públicos, según datos del Departamento de Educación. Este reparto no refleja ni de lejos la cuota de plazas que tienen centros públicos y concertados: el 64,1% los públicos y el 29,7% los concertados.

La concentración de inmigrantes en las aulas públicas apenas se ha movido en tres años en una horquilla que va del 84,3% al 84,5%. La conclusión es que los cambios han embarrancado. Ni la Ley Orgánica de Educación (LOE), aprobada hace tres años y medio, ni las normas que ha aplicado la Generalitat han modificado el reparto de inmigrantes entre las escuelas sostenidas con fondos públicos.

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Las medidas para mejorar la distribución de los extranjeros, aunque insuficientes, han sido varias: reservar dos plazas por grupo escolar hasta el final de la preinscripción para los alumnos con necesidades especiales, incluidos los inmigrantes; elevar hasta el 10% del número de alumnos por aula para acoger a los de nueva incorporación, y dar más funciones a las oficinas municipales de escolarización para repartir a los extranjeros.

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El Gobierno catalán ha decidido que los cambios en la admisión de alumnos no se aborden hasta 2011, aunque un portavoz del Departamento de Educación dice que pueden arbitrarse medidas antes y que no necesariamente se abordará a final de ese año.

Esto puede significar que la medida estrella prevista en la ley catalana de Educación, aprobada en julio, no se desarrolle hasta dentro de dos años: fijar la proporción máxima de alumnos con necesidades educativas específicas (inmigrantes, mayoritariamente) que pueden ser escolarizados en cada centro. Si se supera una cantidad de extranjeros, aún por concretar, los alumnos se repartirían entre otros centros públicos y concertados de la zona. El Ejecutivo catalán ha aprobado empezar a desplegar la ley de Educación el curso que viene priorizando asuntos como la autonomía escolar, las funciones de las direcciones y la evaluación.

Un portavoz del Departamento de Educación admite que globalmente no se ha avanzado en la ansiada distribución de los extranjeros. Pero "hay que tener en cuenta que la oferta de plazas públicas ha crecido estos años mientras que ha bajado la de la concertada". Hace cuatro años la pública tenía el 62,2% de las plazas. Teniendo en cuenta este factor, la acumulación de inmigrantes "en los centros públicos debería haber sido mayor y se ha mantenido", remacha este portavoz.Las escuelas cristianas, que agrupan a la mayor parte de los centros concertados, reconocen que globalmente la cuota de extranjeros no ha crecido en sus aulas. Pero se quejan de que no se les permite crecer en plazas. "Lo hemos pedido y se nos ha dicho que no. Para que podamos aumentar el número de inmigrantes tendrían que autorizarnos más aulas", afirma Enric Puig, secretario general de la Fundación Escuela Cristiana, que reúne a la mitad de los centros concertados catalanes.

Puig recalca que de las 12.500 plazas que ha crecido la concertada en cuatro años, 9.000 ha sido con alumnos extranjeros. Y añade que en algunas poblaciones donde hay más oferta de escuela concertada como Vic, Manlleu y el barrio del Raval en Barcelona, sus centros acogen más extranjeros.

La secretaria general de Enseñanza de CC OO, Montserrat Ros, propone una medida para ayudar a repartir mejor la inmigración en las aulas: bajar el número de plazas por debajo de 25 en las zonas que lo requieran para hacer una reserva a los que puedan venir con el curso empezado, que muchas veces son alumnos extranjeros.

La proximidad al domicilio suele primar a la hora de elegir colegio. Ros afirma que hay centros concertados implantados sólo en barrios de clase media alta. "Construyendo viviendas de protección oficial en todos los barrios" se lograría acercar oferta y demanda escolar, recalca la sindicalista.

El Departamento de Educación destaca que faltan centros concertados en algunos barrios modestos y que, por eso, ha planteado a los concertados que entren en esas zonas.

El catedrático de Educación Comparada de la UAB, Ferran Ferrer, cree que la LOE generó unas expectativas "que ahora se ven que no eran para tanto". Añade que la menor presión de la inmigración por la crisis económica "puede aliviar la carga que hay ahora en los centros públicos".

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