_
_
_
_
_

Una fundación afín al PSOE avisa que la nueva financiación durará poco

El modelo está abocado a la "inestabilidad crónica", dice la Fundación Alternativas

Luis R. Aizpeolea

El informe sobre la democracia en España 2009 editado por la Fundación Alternativas, dirigido por el ex ministro Juan Manuel Eguiagaray, en su apartado sobre la financiación autonómica, señala como "poco probable" que el nuevo modelo de financión que está negociando estas semanas el Gobierno con las comunidades autónomas "esté vigente durante un largo periodo de tiempo". En el texto se afirma que este modelo, vigente durante 10 años, está abocado a una "inestabilidad crónica", y lo atribuye al peso de las relaciones bilaterales en la negociación y a que las desigualdades en la financiación por habitante entre las comunidades forales y el resto de las comunidades autónomas están lejos de desaparecer

La fundación advierte que el nuevo sistema puede ser poco transparente
"Zapatero negocia con escaso margen de maniobra", afirman los expertos

La fundación, en cuyo patronato figuran dirigentes históricos del PSOE como Joaquín Almunia y Felipe González, subraya otros aspectos de la negociación de esta reforma que, a juicio de los redactores del informe, "no dejan mucho espacio para el optimismo". Subrayan, a este respecto, que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "está obligado a negociar con un escaso margen de maniobra debido a las restricciones que imponen los nuevos estatutos, la contradicción de intereses entre las comunidades autónomas que componen la base electoral socialista y la menor capacidad del partido de vertebrar un debate en el que las alianzas se establecen alrededor de los intereses territoriales, no del color político".

El informe destaca que "estas limitaciones pueden acabar desvirtuando el contenido del acuerdo de financiación", y a ellas hay que añadir las derivadas de la coyuntura económica, que "no facilitan precisamente la negociación concreta".

El nuevo sistema de financiación autonómica implicará un aumento de la corresponsabilidad fiscal, de la reducción del mecanismo de nivelación entre los territorios, mayores compensaciones a las comunidades con un mayor aumento de población, la garantía de que todas las comunidades recibirán mayor financiación con el nuevo sistema y la creación de fondos ad hoc que sirvan de compensación. Estas medidas nuevas, según los expertos, tienen un precio, que es "la ausencia de transparencia y la improvisación".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

No obstante, en el informe se admite que el nuevo modelo de financiación autonómica tendrá aspectos positivos, como el aumento de la autonomía fiscal de las comunidades autónomas. Pero se destaca por encima de todo ello que la propuesta del Gobierno sobre el nuevo modelo representa un cambio cualitativo en la nivelación de los servicios no esenciales -los que no corresponden a sanidad, educación y servicios sociales-en las comunidades autónomas, pues pasa de ser un mecanismo basado en la redistribución de recursos de unos territorios a otros a ser fundamentalmente una responsabilidad de la Administración central.

Lo mismo sucede, añade el informe, con el hecho de que por primera vez se plantee la reducción de la nivelación del sistema a los servicios esenciales, pues ello puede abrir la vía a futuras disminuciones del grado de nivelación de las políticas.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_