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La guinda a una buena campaña

Tras mejorar su caja en Navidad, las tiendas esperan facturar un 4% más en las rebajas

Lluís Pellicer

El centro de Barcelona ayer ya estaba preparado para convertirse hoy en un inmenso campo para ir a cazar gangas. En las calles más comerciales las tiendas lucían bajo la persiana los letreros que anunciaban rebajas de hasta el 70%. El negocio que sacarán vale la pena: desde hoy y hasta el 6 de marzo, las cajas de los establecimientos catalanes registrarán entre el 20% y el 25% de su facturación anual, que crecerá un 4% respecto a las rebajas de 2010. De media, durante estos días cada catalán se dejará, sobre todo en ropa y complementos, entre 200 y 250 euros, según la Confederación de Comercio de Cataluña (CCC), y según la Federación de Usuarios y Consumidores Independientes, 105 euros. Suficiente para olvidarse, al menos unos días, de la austeridad.

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Tras más de dos años de crisis, en los que el consumo de los ciudadanos no ha hecho más que deprimirse, los comerciantes empiezan a valorar la campaña navideña con un cierto optimismo. Es decir, las dos semanas festivas no han ido tan mal como para obligar a los tenderos a encomendarse solo a las rebajas. La patronal Pimec cifró el aumento de ventas de esta campaña de Navidad en un 5% respecto a la del año pasado, aunque recordó que todavía dista mucho de llegar a los niveles anteriores a la crisis. "Esta campaña ha sido mejor que la del año pasado, pero sigue siendo floja", aseguró el presidente de Pimec Comerç, Alejandro Goñi.

Para empezar, en las últimas tres semanas ha mejorado la facturación del sector de la alimentación. A ello ha contribuido el hecho de que los precios se hayan mantenido estables respecto a los del año pasado, cuando sufrieron su mayor caída. Bajó la merluza, el rape y, en general, toda la fruta salvo la uva. Según los mayoristas de Mercabarna, un menú anticrisis más que decente podía salir por entre 12 y 14 euros.

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El grueso de las ventas fueron, sin embargo, los regalos: juguetes, ropa y electrónica. Sin excesos. Desde el arranque de la crisis, los comerciantes convienen en que las compras son más reflexivas y poco compulsivas, más inteligentes: se comparan productos y precios, y se intenta ajustarlos al presupuesto familiar. Y en caso de que el regalo no guste, el consumidor no tiene ningún problema en devolverlo. Lo hacen el 32% de los ciudadanos, según una encuesta de Twenga realizada por Internet, muchos más que en otros países de la Unión Europea.

También las grandes superficies celebran el incremento de ventas. Según la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (Anged), las ventas hasta Reyes se incrementaron en un 2% respecto a hace un año. Esa subida les lleva a prever una "buena" campaña de rebajas, en la que se demandará sobre todo textiles de temporada, electrodomésticos y joyas. Este año, además, grandes firmas se han valido de Internet para aprovechar la jornada desde el minuto cero. El Corte Inglés, por ejemplo, ha puesto en marcha una campaña que premia las compras por la red entre las 0.00 y las 10.00, antes de que abran sus tiendas.

Aunque cerradas a cal y canto, en el barrio de Sant Antoni de Barcelona varias tiendas ya habían colgado ayer los carteles con los descuentos de rigor. Lo mismo sucedía en las calles de Pelai, el paseo de Gràcia y el Portal de l'Àngel, donde la mayoría de los escaparates anunciaban para hoy rebajas hasta el 50% y el 70%. Cerca de la principal zona de compras, en Portaferrissa y la plaza de Cucurulla, había tiendas que se saltaron la prohibición de abrir el día de Reyes y que incluso lucían el cartel de "descuentos especiales". Una práctica, el abierto por vacaciones, que el año pasado el Ayuntamiento de Barcelona dijo estar dispuesto a combatir con multas de hasta 60.000 euros.

Los comerciantes se felicitaron sobre todo porque las rebajas este año empiezan en viernes y en un día en el que parte de la población estará de puente. El domingo, además, la normativa permite que las tiendas abran, por lo que los comerciantes podrán redondear el negocio de estas semanas. El secretario general de los comerciantes, Miguel Ángel Fraile, calificó estas fechas de "magníficas" y destacó que la oferta rebajada será entre un 6% y un 7% superior a la del año pasado. Se espera s que la demanda también responda.

La Generalitat, por su parte, prevé realizar más de 5.000 inspecciones en toda Cataluña para certificar que las tiendas cumplen la normativa. El Ejecutivo ya ha terminado la primera fase, que consiste en evitar que se avancen los descuentos, con 4.338 visitas y 137 comercios advertidos. En la segunda fase se comprobará que los artículos promocionados antes del 7 de enero no se incluyan entre las existencias de rebajas. La tercera etapa se producirá en marzo, para que no se siga con las rebajas bajo el cartel de saldos.

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Sobre la firma

Lluís Pellicer
Es jefe de sección de Nacional de EL PAÍS. Antes fue jefe de Economía, corresponsal en Bruselas y redactor en Barcelona. Ha cubierto la crisis inmobiliaria de 2008, las reuniones del BCE y las cumbres del FMI. Licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, ha cursado el programa de desarrollo directivo de IESE.

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