El impacto económico del Circuit de Catalunya cayó un tercio el año pasado
Un amplio estudio encargado por la Generalitat al instituto DEP desvela que el Circuit de Catalunya generó un impacto económico de 120 millones de euros en 2009. No es una cifra para tirar cohetes, porque evidencia un notable descenso con relación al récord de 2007, establecido en 170 millones, pero supone, al menos, una caída sostenible en medio de la crisis global.
Tanto Carod Rovira, vicepresidente del Gobierno tripartito y presidente del Consorcio del Circuit, como Ramón Praderas, director de la instalación de Montmeló, dieron como bueno el resultado del estudio y aceptaron, sin embargo, que el ejercicio de 2009, como el de 2008, se cerrará con pérdidas. "En un mes sabremos el resultado final, pero está claro que la Generalitat, como propietaria del 70% del Consorcio, deberá ejercer su función de avaladora", reconoció Carod Rovira.
El impacto económico es el mayor justificante de estas pérdidas. No sólo por el flujo de negocio que genera especialmente en sectores como comercios (28,9 millones), transportes y comunicaciones (26,8) y hostelería (20,5), sino también por la imagen de país (capacidad organizativa, cordialidad y limpieza son los elementos más valorados por los espectadores) que se ofrece internacionalmente.
El estudio determina que el mayor impacto lo concede la fórmula 1, que aporta en su fin de semana 72,6 millones (el 60,6% del total). La carrera de MotoGP se queda en 30,7, mientras que el resto de competiciones no superan los 16,7. El total de espectadores que acudieron al Circuit en 2009 fue de 700.000. El 77,5% fueron catalanes, el 12,5% del resto de España y el 10% extranjeros. Sin embargo, fueron estos últimos quienes más dinero gastaron: 47 millones. Barcelona recibió la mayor parte de este dinero, pero el impacto se extendió de Girona hasta el Penedès.
