Un mando de los Mossos niega que ocultara datos al juez
El jefe anticorrupción de los Mossos d'Esquadra, Antoni Salleras, defendió ayer la "excelente" investigación realizada por sus hombres y afirmó que sus relaciones con un presunto narcotraficante tenían que ver con el hecho de que este era "colaborador" de la policía autonómica. Salleras declaró ayer como imputado ante el titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona, Joaquín Aguirre, que le acusa de ocultarle pruebas del caso y alertar a miembros de la banda de que estaban siendo investigados. Salleras lo negó.
El mando policial escuchó conversaciones que, según el juez, su equipo no marcó como relevantes. En una de ellas se habla de una entrega que los Mossos interpretaron como de material de automóviles. Salleras también admitió que había cenado varias veces con el confidente, Manuel Gutiérrez Carbajo. El sindicato Manos Limpias, que ejerce la acusación popular, pidió prisión eludible con fianza de 10.000 euros para el subinspector. Está previsto que el juez decida en los próximos días.
