Mas pide más peso del sector privado en la educación y la sanidad

Más participación del sector privado en los servicios públicos. Ese es el mensaje que los dirigentes del Gobierno catalán vienen repitiendo desde hace un tiempo y que ayer el presidente de la Generalitat, Artur Mas, trasladó a los empresarios en un foro organizado por la consultora PricewaterhouseCoopers (PwC). Esa colaboración, que los sindicatos interpretan como una privatización, debería profundizarse en ámbitos como la educación y la sanidad. Mas solo descartó la participación de las empresas en la seguridad, que debe quedar en manos de las Administraciones.

"En las últimas décadas, los políticos hemos cometido el error de explicar a la gente que desde la política se puede hacer todo. Desde la política no se puede, y hasta no se debe resolver todo. Deberíamos pasar del qué necesitáis al qué necesitamos", aseguró Mas. Es más, el presidente insistió en que "la política no lo puede todo". "Y quienes no lo entiendan llegarán al borde del precipicio", remachó.

"Desde la política no se puede ni se debe resolver todo", afirma el presidente

El PP salva los presupuestos de Presidencia, Interior y Economía

Horas más tarde, en el Parlament, el consejero de Economía y Conocimiento, Andreu Mas-Colell, confirmó que la "contribución de la Generalitat" al desarrollo empresarial "se hará este año a través del Instituto Catalán de Finanzas (ICF)" y no "expandiendo la actividad y la demanda públicas". Mas-Colell presentó en comisión parlamentaria los presupuestos de los Departamentos de Economía y Presidencia, que superaron las enmiendas a la totalidad de los grupos de izquierda gracias a la abstención del Partido Popular, al que CiU agradeció de nuevo su "responsabilidad".

La diputada del PSC Marina Geli acusó a Mas-Colell de incumplir el Pacto Nacional de Investigación, Desarrollo e Innovación al "rebajar en un 16%" los recursos para las universidades públicas, y le recordó que el gasto en innovación descenderá el 86,8%. Mas-Colell le contestó que la prioridad de los ciudadanos pasa por los presupuestos de salud, educación y bienestar que, aun así, deberán recortar.

Sin embargo, fue la intervención del diputado de ICV-EUiA Joan Boada la que más irritó al consejero. El ecosocialista lo calificó de "neoliberal de derechas conservador" y lo acusó de ejecutar una propuesta de "desfiscalización". Boada también afeó al consejero que "niegue líneas de inversión" a la empresa Comforsa, participada por la Generalitat. "Tal vez quiera vendérsela", le reprochó, a lo que Mas-Colell le replicó que se trata de "una empresa privada que está por accidente en el sector público".

De igual modo, el consejero de Interior, Felip Puig, salvó los presupuestos de su departamento también gracias a la abstención del Partido Popular. La consejería prevé una reducción presupuestaria del 7% y que, en contra de lo acordado por el Parlament en el mes de mayo, rebajará en 200 agentes la convocatoria de nuevos Mossos d'Esquadra para este año.