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Una promoción de pisos ocupará los terrenos de la antigua discoteca Gran Velvet de Badalona

El Ayuntamiento y Sacresa acuerdan que el 20% de las viviendas previstas sean públicas

Jesús García Bueno

La antigua discoteca Gran Velvet, en el barrio de Montigalà de Badalona, mantiene su original silueta de imponente navío. Hoy, seis años después de cerrar sus puertas, la nave anda a la deriva y abandonada. La sala, en sus tiempos bautizada como "fábrica de sueños", dará paso a una nueva promoción de pisos. El Ayuntamiento de la localidad y la promotora Sacresa han acordado recalificar más de 4.000 metros cuadrados de terreno que eran de uso comercial y pasarán a ser zona residencial. El convenio prevé que el 20% de las viviendas sean públicas.

"El inicio de un viaje hacia el centro de las fiestas. El corazón de la galaxia. El lugar más excitante del mundo: Gran Velvet, Gran Velvet. Preparaos, que la nave va a despegar". Con esta fórmula ritual, el disck jokey Paco Pil infundía ánimo a las masas en una de las multutidinarias sesiones de la discoteca, en octubre de 1994. La sala llevaba por entonces menos de un año abierta y gozaba de un éxito y una popularidad enormes.

Y no sólo por la música. La espectacularidad del edificio tuvo mucho que ver en la fama de Gran Velvet. Obra del prestigioso arquitecto Alfredo Arribas, la sala ocupa 4.385 metros cuadrados de extensión. Su silueta, remachada por una enorme torre, recuerda un transatlántico. A principios de la década de 1990 fue considerada un prodigio de la arquitectura -quedó seleccionada para los premios FAD- y contribuyó a transformar el barrio de Montigalà, en plena expansión por los Juegos Olímpicos de Barcelona.

Ascensión y caída

Los elevados costes de mantenimiento y, sobre todo, dos graves incidentes -el asesinato de un joven en la pista de baile el fin de año de 1994, y el apuñalamiento de otro en los lavabos, en 1997- marcaron el destino aciago de la sala. En 1999, tras varios cambios de nombre, cerró definitivamente. Desde entonces, ha permanecido dejada de la mano de Dios. Sólo algunos jóvenes se adentran en su interior de vez en cuando, y asumiendo cierto riesgo para su seguridad.

El convenio firmado entre el Ayuntamiento de esta localidad del área metropolitana y la promotora Sacresa prevé poner fin a la situación de abandono y, de paso, obtener cierta rentabilidad: la zona acogerá una nueva promoción de pisos. Aunque el planeamiento urbanístico de esta parcela aún está en una fase muy inicial, un portavoz aseguró que, con toda probabilidad, Gran Velvet será derribada. La única posibilidad de que el singular edificio se salve es que "forme parte del porcentaje de espacio para equipamientos y se transforme en una biblioteca o un centro cívico".

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Las dos partes que han firmado el convenio han acordado tramitar la modificación del plan especial de esa zona. En otras palabras: el terreno, que en principio está destinado al uso comercial y también industrial, pasará a ser calificado como zona residencial. La parcela, situada entre las calles de Filosofía, Técnica, Ciencia y Menéndez Pelayo, acogerá viviendas plurifamiliares. Todavía se desconoce el número exacto de viviendas, aunque el techo edificable es de unos 4.000 metros cuadrados, según un portavoz municipal. El acuerdo prevé además la ordenación y urbanización de la manzana.

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Sobre la firma

Jesús García Bueno
Periodista especializado en información judicial. Ha desarrollado su carrera en la redacción de Barcelona, donde ha cubierto escándalos de corrupción y el procés. Licenciado por la UAB, ha sido profesor universitario. Ha colaborado en el programa 'Salvados' y como investigador en el documental '800 metros' de Netflix, sobre los atentados del 17-A.

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