Amistades peligrosillas
Las obras maestras del cine son irrepetibles. Aunque los artistas implicados en el intento de emulación sean los mismos, aunque el material previo que ejerce de guía tenga semejantes particularidades y subtextos. En 1988, Stephen Frears, como director, Christopher Hampton como guionista, y un grupo de grandes intérpretes -Glenn Close, Michelle Pfeiffer, John Malkovich...- partieron de una novela de finales del siglo XVIII de Choderlos de Laclos para crear Las amistades peligrosas, soberbio espectáculo emocional sobre la frustración, la humillación, la apariencia, la hipocresía y la venganza como terapia curativa para las oscuridades del alma. Dos décadas después, Frears, Hampton y Pfeiffer comandan Chéri, otro drama sobre la manipulación sentimental, ambientado en la prostitución de lujo de la belle époque parisiense de principios del siglo XX, de sucesivas similitudes con aquélla -el plano final de ambas películas es casi calcado en el fondo y en la forma-, pero que nunca alcanza la categoría a la que nos tiene acostumbrados su director. ¿La culpa? Se ve a la legua: la letra de Colette, novelista francesa autora de la novela original, más cercana a un erotismo de liberación que a un combate sexual de verdadera complejidad, no alcanza para repetir la grandeza de Las amistades peligrosas. Además, aterrizada una semana después de la magnífica Up in the air, con la que Chéri podría mantener un diálogo sobre la intemporalidad del amor como veneno para las relaciones sexuales sin compromiso, sale de nuevo malparada. Los textos de Colette parecen los de un aplicado aprendiz de Oscar Wilde al que se le acaba viendo el plumero. Quizá suficiente para conformar una pequeña película de cámara con un puñado de actores, escenarios mínimos y algún esporádico diálogo sangrante. Muy poco más. Frears, inclasificable autor con al menos un par de soberbias películas en cada una de las tres últimas décadas (ejemplo: en ésta, Alta fidelidad y La reina, que se parecen como un huevo a una castaña), no necesitaba copiarse a sí mismo.
CHÉRI
Dirección: Stephen Frears. Intérpretes: Michelle Pfeiffer, Rupert Friend, Kathy Bates, Iben Hjejle. Género: drama. Reino Unido, 2009.
Duración: 92 minutos.