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Cultura ofrece el Prado a Tomás Llorens

Carmen Alborch explica al patronato del museo la dimisión de Calvo Serraller

El pleno del patronato del Museo del Prado, que se reúne a las cinco de la tarde de hoy, sólo tiene un punto en el orden del día: informe de la ministra. Los nuevos patronos, nombrados hace cinco meses, serán los primeros en conocer la versión de CarmenAlborch sobre la dimisión de Francisco Calvo Serraller a los 200 días de su nombramiento y su interpretación del texto publicado en EL PAÍS, en el que explicaba las razones de su marcha.

En la misma reunión está previsto que el patronato conozca el nombre del nuevo director, aunque anoche Alborch declaró en la presentación del libro Museos abiertos a todos los sentidos: "Si tenemos que estar una semana o dos sin director del Museo no pasa nada", informa Efe. Las quinielas que circularon ayer por el Ministerio de Cultura y el propio museo iban cambiando cada hora, con la posibilidad abierta de Manuela Mena, actual subdirectora, aunque en la mayoría se apostaba por Tomás Llorens como el perfil más adecuado a la actual situación. La ministra buscaría un nombre de confianza que siguiera el impulso dado por el anterior director. Tras el descarte de nombres vinculados a la pinacoteca, como Alfonso Pérez Sánchez, director honorario, la otra dirección era la de los intelectuales administrativos, entre los que han figurado Fernando Checa, historiador y miembro del comité científico. " La Administración no tiene el coraje de replantear el museo de arriba abajo; necesita una reforma absoluta y apoyo político serio", declaró ayer.

Tomás Llorens recibió a las 0.15 de ayer una llamada de la ministra de Cultura: "No puedo decir nada", Tomás Llorens (Almassora, Castellón, 1936) no quiso manifestarse ayer sobre su posible nombramiento, ni confirmar que había mantenido por la mañana una conversación con la ministra. En fuentes de su entorno se pensaba que llegaría a acetar el cargo, al terminar una etapa al frente del Museo Thyssen, aunque se tendría que salvar el difícil nombramiento del mismo cargo en la Thyssen, que también depende de la ministra de Cultura.

Tomás Llorens fue el primer director del Museo Nacional Reina Sofía, hasta que fue destituido por el ministro Jorge Semprún en diciembre de 1990 al no aceptar su proyecto para la colección permanente. Desde mediados de los años ochenta, Carmen Alborch y Tomás Llorens coinciden en cargos públicos, primero en la dirección general de Cultura y Patrimonio, respectivamente, siendo consejero de Cultura el actual secretario de organización del PSOE, Ciprià Ciscar, y después en la dirección sucesiva del Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM).

Cultura quiere minimizar el cambio. "Es el Ministerio quien dicta las líneas y proyectos del Prado, que necesita un director capaz de aportar el impulso necesario", dijo ayer el subsecretario del departamento, Enrique Linde, quien se mostró contrariado con la salida de Calvo Serraller. "Es una persona que contaba con nuestra confianza", señaló Linde.

Miguel Ángel Cortés, portavoz de Cultura del Partido Popular en el Congreso, declaró ayer que mientras no se elabore un "programa sobre el Prado" no se conseguirá la estabilidad.

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