Chandra: "El hampa extorsiona a Bollywood"
Bollywood encara un frente que ensombrece el éxito de sus musicales hipercoloristas: la mafia india. El escritor Vikram Chandra (Nueva Delhi, 1961) conoce muy bien cómo se las gasta un gánster de Bombay. Su cuñado, productor y director de cine, se negó a aceptar la extorsión de los popes de los bajos fondos -los bhais- y durante un tiempo no pudo salir sin protección.
No es el único episodio relacionado con el hampa que ha sufrido de cerca. A principios de los noventa, vio cómo un capo caía tiroteado por la policía y pocos días después dispararon a un conocido en su vecindario. Aquella violencia cotidiana le llevó a investigar las redes criminales de su país, a través de entrevistas a agentes de los cuerpos de seguridad y a integrantes de hermandades.
El resultado de su pesquisa tiene forma de novela negra: Juegos sagrados (Mondadori), una suerte de El Padrino a lo indio. Los dos antagonistas de la trama son el detective Sartaj Singh y el rey de los pandilleros, el traficante Ganesh Gaitonde, un tipo sin escrúpulos que en su tiempo libre se dedica a trabajar como agente secreto del Gobierno. Los dos exploran la parte oscura de las ciudades.
De guerrilleros maoístas a viudas desesperadas que padecen de mobbing urbano: en Juegos sagrados se suceden las historias que saltan en el tiempo para demostrar que en la India todo está conectado y nada es nuevo. "Quería hablar de la violencia local, que había llegado a unos límites insoportables. Pero cuando empecé a investigar me di cuenta de que es imposible hablar del crimen organizado sin referirse a la política, a la religión, a los medios... Es un entramado enorme. Y Bollywood sufre a diario la extorsión de la mafia india", dice el autor.