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Rescatan un antiguo campamento romano de las aguas de un embalse de Orense

Se tardará años en recuperar todos los restos

Un campamento romano al que se atribuye una gran importancia arqueológica en la zona en que ha sido hallado, fue encontrado recientemente en las aguas del embalse de Las Conchas, en la provincia de Orense. El descubrimiento, que se viene a sumar a los que se han efectuado en otras áreas arqueológicas españolas en los últimos tiempos, está siendo evaluado por los que han llevado a cabo las investigaciones. La presencia de este campamento romano se comprueba después de que se creyera que las piedras que aparecieron en Las Conchas en 1975 carecían de todo valor documental para la historia de Galicia. Se tardarán años en recuperar todos los restos.

Pocos especialistas podían creer que los restos que en el año 1975 empezaron a emerger de entre el lodo del embalse de Las Conchas, en el sur de la provincia de Orense, pudieran tener algún valor. Poco tiempo después, algunos arqueólogos han tenido que repasar sus esquemas ante la comprobación de que esas piedras son parte del campamento en el que una unidad romana asentó su refugio hace aproximadamente 1.930 años.En una superficie de unas cuatro hectáreas, casi emergiendo de las aguas del río Limia remansadas por la presa, está siendo descubierto y recuperado el primer campamento romano de Galicia. La Prensa regional ha venido dedicando varios trabajos al tema desde que hace ocho años un grupo de arqueólogos, dirigidos por el profesor orensano Antonio Rodríguez Colmenero, titular del Departamento de Historia Antigua de la universidad de Oviedo, emprendió la tarea de rescatar esta sobresaliente reliquia romana, en una zona pletórica de arte e historia como la comarca de Banda y Celanova, al sur de la provincia de Orense.

Residencia para el equipo investigador

La riqueza y el valor de los hallazgos ha llevado incluso a la creación de una residencia permanente para el equipo investigador en las inmediaciones del campamento castrense, entre los pueblos de Baños de Banda y Porto Quintela.

De acuerdo con las observaciones realizadas por el equipo investigador, este campamento estaba emplazado junto a la Vía 18 del itinerario Antonino, desde Braga a Astorga, y se instala próximo a unas importantes termas, hoy prácticamente abandonadas.

Este trayecto, en sus principales etapas, partía de Salamana (Portugal) y continuaba por Aquis Originir (Baños de Bandarío Caldo) y Aquis Querquennis, próxima al lugar campamental. Acabó de construirse el itinerario vial en el año 1979, siendo gobernador de la provincia tarraconense Cayo Carpetano Rantio Quirinal Valerio Festo. La extensión del campamento hace pensar a los técnicos que pudo albergarse en él una cohorte quinquenaria, de unos 480 hombres, incluso una miliaria de casi 1.000 soldados.

El director de las excavaciones cree que serán necesarios varios años de trabajos para rescatar por completo los restos. Los arqueólogos cuentan con las aportaciones ordinarias del Patrimonio Artístico y Arqueológico Nacional, así como diversas subvenciones cuyo montante difícilmente cubre el gasto de un trabajo tan delicado que sólo puede realizarse con mano de obra directa, sin intervención de ninguna maquinaria.

En cualquier caso, los que han llevado a cabo las investigaciones consideran que el hallazgo y la posterior observación de su importancia es un milagro, en cuya realización también están colaborando intensamente licenciados en Arqueología y alumnos de las universidades de Santiago de Compostela y Deusto (Vizcaya).

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