Iván Zulueta no tira la toalla
Su filme 'Arrebato' ha sido elegido Película de Oro en el Festival de Málaga

Valieron la pena los esfuerzos titánicos por convencer a Iván Zulueta de abandonar por unos días su ciudad natal, San Sebastián, y viajar a Málaga. El director de Arrebato, esa película de culto y drogas realizada hace 28 años y que se ha convertido en título esencial en la historia del cine español, no tira la toalla. Locuaz, divertido, emocionado, sincero.
"Quisiera no perderme en esos entresijos de la metadona"
| Blog de Jordi Minguell desde Málaga |
Zulueta fue todo eso ayer, a sus 65 años, durante el encuentro que mantuvo con la prensa horas antes de recibir el Premio a la Película de Oro por Arrebato en el XI Festival de Cine Español de Málaga. Con un escandaloso traje amarillo de cuadros que le quedaba grande y unas gafas plateadas, el cineasta y cartelista fue recibido con un cariñoso aplauso y despedido con otro mucho más emotivo.
Bastó una hora para que Zulueta hablara con claridad y a veces con dolor. Fueron muchas las frases cortas pero contundentes, y otras más largas, algunas interrumpidas y jaleadas por sus amigos, que hicieron posible Arrebato y que ayer le acompañaron con fervor -los actores Eusebio Poncela, Elena Fernán-Gómez y Marta Fernández Muro y el productor Augusto Martínez Torres-. "Tengo un grave problema para trabajar, no arranco, lo último que hice fueron una decena de carteles de cine, pero eso hace ya casi 10 años. Quisiera no perderme en esos entresijos de la metadona que en Euskadi no reparten como medida terapéutica. Los últimos carteles que he hecho no me han gustado mucho y eso para mí es muy doloroso", confesó Zulueta, para a continuación afirmar: "Pero no he tirado la toalla. Quiero hacer cine".
Fueron muchos los recuerdos que fueron saliendo del rodaje de Arrebato, realizado a finales de los años setenta en el pueblo de La Mata, cercano a Segovia, y luego en Madrid. "Mi recuerdo es fabuloso. Allí en La Mata, donde rodábamos y vivíamos, oliendo a campo... fue una mezcla de todo lo soñado... yo no dormía". No es consciente de que Arrebato se ha convertido en una película de culto -"mejor, así no alimentamos el ego, que es un peligro"-, pero sí de que el éxito que la ha rodeado durante esos últimos casi 30 años se debió a una cosa bien sencilla: "Creo que es honrada, aunque tendría que haber potenciado más el trabajo de guión. Yo estaba entonces enamorado".
Zulueta sólo ha visto seis veces su película -estrenada una semana en Madrid en junio de 1980 y recuperada un año después por Javier Garcillán, el creador de los cines Alphaville- porque no quiere arriesgarse a hacerlo -"hay muy pocos días que me cae bien".
¿Por qué no ha hecho más cine?, le preguntaron. "Me metí en un mundo de drogas que me interesaba mucho. Lo tenía controlado y lo llevaba bien... Eso creía yo... Después de Arrebato, tuve la brillante idea de ir a Ibiza a descolgarme de las drogas... un infierno, épocas suicidas, y me perdí. Fue una pérdida absoluta de control".
Ayer los amigos de Zulueta estuvieron más entregados que nunca. Sólo hubo un pequeño reproche, aunque ya está olvidado. Elena Fernán-Gómez, hija del actor recientemente fallecido Fernando Fernán-Gómez, le recordó, ya divertida, la única pega a su película: el haber doblado su voz. Ella hacía el papel de travesti en Arrebato. "¿A que no sabes quién puso la voz en el montaje? Pedro Almodóvar", dijo la actriz.
Había pasado ya una hora de confesiones, recuerdos y risas. "Ha sido la rueda de prensa más sexy y divina a la que he asistido nunca", dijo Eusebio Poncela. "Pues desnudémonos", finalizó Zulueta antes de ponerse en pie y aplaudir, él, al público presente.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma

Archivado En
Últimas noticias
El alcalde de Sevilla desbloquea el Plan de seguridad para Navidad gracias a Vox
Los agricultores mexicanos llegan a un acuerdo de última hora con el Gobierno para evitar nuevos bloqueos en fechas navideñas
Sorteo de la Champions femenina: el Madrid jugará el playoff con el Paris FC; el Atlético, con el Manchester United; y el Barça aguarda en cuartos un posible clásico
El Supremo da un mes al Gobierno apara acoger a los menores no acompañados solicitantes de asilo en Madrid
Lo más visto
- La población de pumas de la Patagonia se dispara gracias a una presa inesperada: los pingüinos
- El Supremo ordena al ex fiscal general el pago de la multa y la indemnización a la pareja de Ayuso que le impuso al condenarle
- Carlos Alcaraz y Ferrero rompen tras siete años: “Llegan tiempos de cambio para los dos”
- Sánchez, contra la Comisión Europea: “Es un error histórico” el paso atrás con los coches de combustión
- Los hijos de Isak Andic negocian un acuerdo para pagar 27 millones a la pareja del empresario y cerrar el conflicto por el legado




























































